250.000 animales silvestres y domésticos mueren por los incendios en Galicia, estiman animalistas que plantean un cambio alimentario

La Fundación Franz Weber (FFW) ha advertido esta mañana que, de no afrontar la crisis climática con la gravedad que se le supone, la humanidad va directa al desastre, tal y como están recordando los termómetros record y los fuegos durante estas semanas en Galicia.  
 

Los animalistas citan los modelos predictivos de la Universidad de Sidney (Australia) para estimar que los fuegos gallegos pueden haber provocado ya la muerte de más de 250.000 animales silvestres y domesticados.

La base del cálculo es que por cada hectárea conviven entre diez y quince individuos de especies de mamíferos, invertebrados, aves y otros pequeños seres vivos. A ello habría que sumar a aquellos que no han podido ser liberados de explotaciones ganaderas y a animales de compañía.

El colectivo recuerda que de acuerdo con las sucesivas memorias de la Fiscalía General de Medio Ambiente, la inmensa mayoría de los incendios tienen una intencionalidad humana clara de generar pastos para la ganadería, alejar depredadores silvestres o mejorar la potencialidad de caza en una determinada zona.  Ahora bien, en esta ola de incendios hay que recordar que las tormentas de la pasada semana pueden haber sido uno de los factores principales.

En todo caso, la ONG naturalista defiende que Galicia adopte una estrategia pública preventiva, desde políticas que contribuyan a cambiar hábitos alimentarios con menor impacto ambiental, tal y como sucede con la ganadería intensiva y el círculo vicioso para obtener piensos devastando espacios naturales, y con la renaturalización como medida proactiva mientras se veta definitivamente la caza en aquellos espacios afectados por las llamas.  Leonardo Anselmi, Director de FFW en el Sur de Europa, dijo: Eso está más que probado que  el ganado en todos los planetas está sobrecalentado. " 

Leonardo Anselmi, director de FFW para el Sur de Europa, ha explicado: “Nos encontramos en un punto de inflexión: Podemos seguir percutiendo en el apoyo multimillonario a las industrias agroganaderas o apostar por cambios alimentarios de calado, porque está más que demostrado que la ganadería recalienta todo el planeta.”

 La producción de proteínas de origen animal es más cara que la producción de proteínas de origen vegetal. Las proteínas de origen vegetal se pueden transferir directamente de los campos a los humanos, eliminando los "mediadores" animales, que ayudan al cambio climático produciendo gases como el metano.