Sanxenxo espera que la nueva visita del Rey Juan Carlos I ayude a que fije allí su residencia (vídeo)

La presencia del monarca Juan Carlos I en Sanxenxo ha sido considerada beneficiosa para la localidad en términos turísticos por varias razones. En primer lugar, la atención mediática generada por las visitas del monarca y su familia ha aumentado la visibilidad de Sanxenxo como un destino turístico, atrayendo a visitantes españoles y extranjeros interesados en conocer el lugar donde la Familia Real pasa sus vacaciones de verano.

Además, la presencia del monarca y su familia en Sanxenxo ha sido considerada como un respaldo a la calidad y seguridad del destino turístico, lo que ha contribuido a generar confianza en los turistas y a consolidar la imagen de Sanxenxo como un lugar de descanso y recreación para la élite española y la alta sociedad, en particular de Madrid.

Asimismo, las visitas del monarca han generado un impacto económico positivo directo en la localidad, por ejemplo en la última ocasión fueron varios cientos los periodistas de toda España que hasta allí se desplazaron. En esos días hay un repunte en demandas alojamiento, restaurantes y otros servicios relacionados, lo que ayuda a generar empleo.

 La localidad pontevedresa de Sanxenxo se prepara ante la llegada del rey emérito Juan Carlos I, al que se espera en las Rías Baixas para participar con su barco, el 'Bribón', en una regata del campeonato español de vela que se celebra este fin de semana.

A pocos días del aterrizaje en tierras gallegas del emérito, el sector hostelero de la turística localidad gallega, los vecinos y sus visitantes encuadran en la "normalidad" el segundo viaje en menos de un año a Sanxenxo, a la que acudió en mayo de 2022 en la que fue su primera visita a España desde que en 2020 estableció su residencia en Abu Dhabi.
 

AVALANCHA DE PERIODISTAS
Entonces, más de 200 profesionales de medios de comunicación se desplazaron a Sanxenxo para cubrir el fin de semana que el exjefe del Estado pasó en la localidad gallega, donde estuvo alojada en la casa de su amigo y presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo, Pedro Campos.

De cara a este año, el sector hostelero de uno de los puntos más turísticos de Galicia resta importancia al posible impacto en las reservas que la presencia de Juan Carlos I en Sanxenxo pueda suponer.

En declaraciones a Europa Press este lunes, el presidente del Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo (CETS), Alfonso Martínez, ha señalado que se trata de un fin de semana señalado en el calendario pero por la celebración de la regata, no tanto porque en ella vaya a estar el emérito, más allá del revuelo mediático que esto acompaña.

¿SERÁ HABITUAL ALGÚN DÍA?
"El año pasado tuvimos a más de 200 medios de comunicación acreditados. Nos vimos un poco desbordados", ha apuntado Martínez, que espera que la tendencia se encamine a normalizar la presencia de Juan Carlos I en Sanxenxo, donde "siempre es bienvenido".

"Es una visita privada. Para nosotros y para los vecinos es algo normal, debería estar dentro de esa normalidad", ha remarcado, en la línea de algunos vecinos y visitantes que este lunes aprovechaban la calurosa mañana en la costa pontevedresa para disfrutar del paseo marítimo y la playa de Silgar.

"Aquí es uno más", comenta Luis, nacido en la localidad pontevedresa, donde ha residido "siempre" y en la que, dice, el rey emérito "siempre" será bien recibido. "Me sorprende un poco que venga a un sitio como Sanxenxo, pero me parece bien", resalta, por su parte, Adrien, un belga que pasa estos días con su pareja en las Rías Baixas.

El responsable del consocio de hostelería de Sanxenxo ha reconocido que no existen estimaciones de ocupación para este fin de semana, aunque se esperan buenos datos como los que dejó la Semana Santa, especialmente si el tiempo acompaña como lo ha hecho en las últimas jornadas de cielos despejados y temperaturas altas para la época.

Con un ojo puesto en el mar y en el cielo y otro en las instalaciones del club náutico, Sanxenxo vivirá otra semana con el foco mediático de todo el país situado hacia esta localidad de las Rías Baixas que cuenta con poco más de 17.000 habitantes censados.