Inspección prevé sanciones a las ambulancias de A Coruña, alerta la CNT, y la concesionaria dice que aún espera respuesta

La precariedad  en el sistema sanitario no es exclusiva del SERGAS, también se padece a menudo en el sector del transporte en ambulancia. Así, la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) indica que un informe de Inspección de Traballo contempla “sanciones” contra la UTE de Servicios Sanitarios de Coruña S.L. (SSC)-Ambulancias María Pita S.L. Esta contratista pública cubre en el área sanitaria de A Coruña y Cee en lo referido a transporte hospitalario urgente del SERGAS y al sanitario no urgente.

VERSIÓN DE AMBULANCIAS MARÍA PITA

Tras las denuncias del sindicato, las adjudicatarias prefieren actuar con cautela y se muestran reservados . Consultados por Galiciapress, desde Ambulancias María Pita subrayan que la empresa “entregó en tiempo y forma toda la documentación solicitada por Inspección y a día de hoy estamos a la espera de su respuesta”, sin indicar si han realizado cambios ni entrar a valorar la actuación de Inspección de Traballo o las denuncias sindicales.

La CNT refiere que la última visita de Inspección de Traballo e Seguridade Social, motivada por la denuncia presentada por el sindicato, supuso una serie de castigos contra las empresas y no sería la primera vez que sucede algo similar. “Son ya varias las ocasiones en las que la patronal del sector sanitario tuvo que rendir cuentas ante la Administración Pública o los Juzgados”, indican en su nota.
 

La última denuncia sindical reclamaba la puesta en práctica de “medidas correctoras” relativas a la prevención de riesgos psicosociales, ya que, según afirma el sindicato, “la empresa  no cumple con una correcta distribución de turnos de trabajo, que la Inspección considera que no son equitativas entre todo el personal adscrito al servicio”. La carga de trabajo, “excesiva” a juicio de la CNT, y la escasa o nula información y formación que recibe el personal, son otros aspectos de la demanda. 

Otro punto que el sindicato puso en conocimiento de la Inspección fue el hecho de que “los servicios no se ajustan al ‘Protocolo de prestación de servicios en transporte hospitalario’”. En este sentido, sostienen que los tiempos durante el servicio son “excesivamente cortos”, afectando a los usuarios “al tener que realizar las funciones de recogida y entrega en hospital en plazos excesivamente cortos y no adecuados”. 

SANCIONES

Inspección de Traballo tomó buena nota de todas las acusaciones y emitió un informe en el que reconoce los riesgos “muy elevados” de las prácticas de la concesionaria, de la que dice “no tiene en cuenta el ritmo de trabajo en relación con el riesgo de sufrir accidentes de tráfico y de sobrecarga”. Ello supone “poner en peligro la vida y la integridad física” tanto de los trabajadores como de los pacientes.
 

También Inspección anotó los problemas en los tiempos del servicio, por lo que “se asignaron rutas y trabajos de conducción que suponían incumplir el protocolo de tiempos acordados, provocando que la conducción pudiera ser precipitada y poco segura, llevando a aumentar claramente el riesgo de accidente de tráfico, lo que supone también un riesgo psicosocial asociado a la carga de trabajo”. 

Por todo ello, “se califica de extremadamente grave y se llama al SERGAS a intervenir la concesión y rescindir el contrato de servicios con la UTE”, reza la nota de la CNT.