Mientras esto sucede, el partido que lidera la oposición, ese que dijo haber ganado las elecciones, abraza a los presuntos agresores -literalmente- y utiliza a esta misma ultraderecha como muleta y radicalizan sus posturas para tratar de atraer a sus votantes, muchos de ellos mujeres que sostienen sus mismas tesis misóginas. No sé si es una cuestión cultural, de educación o si va en nuestro ADN. Tampoco sé si existe un remedio, más allá de educar en igualdad y en respeto hacia la otra parte de la población mundial.
El colectivo Marcha Mundial das Mulleres promueve las movilizaciones convocadas para el 25 de junio ante las distintas sedes del PP de Galicia de las principales ciudades. La plataforma atiende a Galiciapress para explicar las razones de estas protestas, motivadas por la presunta agresión sexual del exconselleiro Alfonso Villares y por la actitud "cómplice", según dicen, que ha mantenido el Gobierno de Alfonso Rueda, donde piden dimisiones: "Los que aplaudieron deberían posicionarse con la víctima".