La enorme capacidad de computación que usa la Inteligencia Artificial hoy implica el consumo de ingentes cantidades de agua y energía. Dado que el consumo actual es nimio comparado con lo que exigirá en el futuro, se ha desatado una carrera para buscar soluciones.
Científicos de universidades de varios países europeos concluyen que el riesgo de incendios extremos, como los sufridos este verano, se multiplica por 40. Esta ha sido la peor temporada de incendios en la historia de Europa. El 68% son accidentales.