Un buldócer facilitado por la Diputación de Ourense arrasó la tumba neolítica

El alcalde, que gestionó la máquina que provocó el destrozo, asegura que nadie sabía que allí había un yacimiento; pero la Guardia Civil recuerda que las mámoas fueron valladas hace tres años

Los daños registrados en tumbas neolíticas en el municipio de O Irixo (Ourense), catalogadas como bien cultural, se han producido al hacer con una máquina "cortafuegos y caminos" en monte comunal.

Así lo ha explicado, en declaraciones a Europa Press, el alcalde de la localidad, Manuel Penedo, quien ha recordado que "el año pasado vecinos de O Quinteiro solicitaron un buldócer para hacer caminos y cortafuegos".

Por ello, el regidor solicitó la máquina a la Diputación provincial al carecer el Ayuntamiento de O Irixo de una y, una vez concedida, "hicieron los caminos y cortafuegos en el monte comunal".

Preguntado sobre si se adoptó alguna medida para proteger las mámoas de la zona, el alcalde ha señalado que "seguramente cuando hicieron los caminos y cortafuegos estaba todo lleno de maleza por todos los lados". "Pasó el buldócer y no las vio", ha abundado, tras señalar que, por parte del Consistorio, "se puso a disposición el buldócer y punto".

En relación a si era necesario solicitar algún permiso especial para obrar en una zona con mámoas catalogadas como bien cultural, el regidor ha asegurado que desde que él gobierna "nunca hay permisos para estas cosas".

ALEGA QUE NADIE SABÍA DEL YACIMIENTO
Con todo, ha considerado que se trató de un "accidente lamentable" porque "se fastidió una mámoa". "Nadie sabía de ella", ha justificado en relación a la más dañada, mientras que ha puntualizado que las otras dos "apenas tienen nada".

Finalmente, ha asegurado que el Ayuntamiento de O Irixo se encuentra a disposición del departamento de Patrimonio de la Xunta "a ver qué dice" en relación a los daños registrados en estas tumbas neolíticas.

Túmulo de Barro antes de ser arrasado en un imagen de la Guardia Civil

EL SEPRONA RECUERDA QUE FUERON MARCADAS POR LAS OBRAS DEL AVE

Desde la Guardia Civil, se apunta que las mámoas arrasadas si eran conocidas. Un portavoz del SEPRONA recuerda que, debido a las próximas obras del AVE, fueron valladas hace tres años para evitar, precisamente, que la maquinaria pesada de los trabajos las dañaran. 

INVESTIGACIÓN
En el marco de la 'Operación Sepulcrum' el equipo de Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Ourense inició una investigación tras recibir denuncia efectuada por representante de la Asociación Cultural Mámoa Verde, que puso en conocimiento daños en tres mámoas ubicadas en la parroquia de Santa Mariña de Loureiro, en O Irixo.

La Benemérita ha indicado que se registró "la destrucción total de la mámoa conocida por Túmulo de Barro", una tumba neolítica de 6.000 años de antigüedad y la "destrucción parcial de la mámoa conocida por Túmulo 3 da Bugalleira y Túmulo 4 da Bugalleira, ambas igualmente tumbas neolíticas de 6.000 años de antigüedad". La Guardia Civil ha destacado que todas ellas están incluidas en el Catálogo de Bienes Culturales de Galicia.

La investigación para el esclarecimiento de los hechos denunciados ha constatado que la mámoa Túmulo de Barro "se ha destruido totalmente habiendo desaparecido al ser allanado el terreno".

Mientras, las otras dos "han sido afectadas parcialmente por maquinaria usada para una plantación de pinos". El Instituto Armado indica que "no consta ningún tipo de autorización" tanto del departamento de Patrimonio dependiente de la Consellería de Cultura, ni del Ayuntamiento de O Irixo.

De este modo, la Benemérita constata que las obras que han dado lugar a los daños en las mámoas "han sido promovidas por la Comunidad de Montes Vecinales en mano Común de Loureiro, denominada CMVMC O Quinteiro, de la que aparecen como responsables los tres integrantes de su junta rectora, así como un operario que manejaba la maquinaria utilizada en estos hechos".

Tras tomar declaración en calidad de investigados a estas cuatro personas por un delito sobre el patrimonio histórico, las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de O Carballiño.