La presión obliga a PSA Vigo detener la producción este martes, aunque cerrará el miércoles

Los sindicatos de clase denunciaron ante Inspección de Trabajo a la empresa, que finalmente cede. El sindicato propio de la firma, el más votado, no denunció.

La línea de producción principal de la planta de PSA Peugeot Citroën en Vigo se detendrá tras la finalización del turno de mañana de este martes, mientras que las instalaciones se cerrarán desde este miércoles hasta, previsiblemente, el próximo 27 de marzo para prevenir el incremento de contagios por coronavirus.

Fuentes de la dirección de la fábrica han informado de que, tras una reunión con el comité de empresa, se ha acordado que el cese de la actividad se realice "de modo escalonado". Así, tras la parada de la línea de producción principal, a las 14,00 horas, durante este martes y este miércoles "se llevarán a cabo las labores necesarias para la expedición de los vehículos fabricados". Los mecanismos que se aplicarán para afrontar las consecuencias en el ámbito económico se acordarán en próximas reuniones.

Adicionalmente, el cierre de los talleres de Ferraje y Pintura será gradual, por lo que los empleados de esta área no realizarán su jornada completa este martes. Mientras, este lunes será el último día de trabajo de los trabajadores de los turnos de tarde y noche, así como de los de Ferraje M3/M4.

También se habilitará un teléfono de contacto para informar sobre el transcurso de esta situación a los empleados, que deberán notificar a la empresa si presentan un resultado positivo en coronavirus durante los días en los que la producción permanezca parada.

CIERRE EN EUROPA
Este lunes, el grupo automovilístico PSA anunció el cierre de sus plantas de producción instaladas en Europa como consecuencia del aumento de casos de coronavirus y fijó este miércoles como fecha para la clausura de las instalaciones con las que cuenta en Vigo.

Ante esta situación, los sindicatos reclamaron el cierre "inmediato" de la planta al considerar que no cumplía las "garantías mínimas" de seguridad exigidas por el Gobierno ante el avance del coronavirus. Posteriormente, se realizaron dos reuniones entre las centrales y la dirección de la fábrica que permitieron acordar la paralización gradual de la actividad.