​La Xunta se reúne este jueves con representantes del ocio nocturno con la amenaza de protestas del sector en A Coruña

Este jueves está programada la celebración de un encuentro telemático entre representantes del sector del ocio nocturno con la Xunta de Galicia para acercar sus inquietudes y propuestas en plena crisis del coronavirus. 

Mientras, a la espera del acercamiento entre los afectados y la administración pública, en A Coruña la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería ya ha anunciado protestas contra las medidas tomadas por los gobiernos central y autonómico, que han abocado al cierre de algunos de estos negocios.

"Si seguimos en esta línea, el sector empezará con movilizaciones", advierte el presidente de la entidad, Héctor Cañete. Y es que, de prolongarse las restricciones de aforo y horario, al igual que el cierre de los locales de ocio nocturno, los hosteleros valoran la posibilidad de emprender acciones legales para intentar mantener a flote el sector.

Con una facturación menguante y acercándonos al fin de la temporada vacacional, a muchos ya ni les compensa levantar la verja. “Cada vez más compañeros están empezando a cerrar motu propio porque no es rentable”, lamenta Cañete, que pide ayudas para el sector para poder hacer frente a los gastos que todavía tienen que afrontar.

AYUDAS AL OCIO NOCTURNO

Mientras las denuncias de los hosteleros siguen su curso, hoy se celebra una reunión telemática entre la Xunta de Galicia y representantes del ocio nocturno. Estos últimos, afectados por las decisiones del Gobierno de Galicia, señalan que la situación hoy es “crítica” y que se sienten “criminalizados” y “señalados” por la administración, pese a que los locales en los que se   detectan brotes son una minoría.

Como los hosteleros, desde el ocio nocturno piden ayudas para gastos como el pago a trabajadores, alquiler de locales o facturas de luz.

QUIEBRA DE NEGOCIOS Y CANCELACIONES

Desde Hostelería Compostela y la Asociación de Bares, Pubs y Discotecas, Sergio Fernández estima que un 20% de los locales compostelanos "pueden ir a la quiebra" por el nuevo cierre, que les impedirá "llegar a fin de mes" por los gastos mencionados anteriormente, además de gastos a mayores para tareas de desinfección y limpieza.

Todo esto también está generando un clima de intranquilidad sobre los consumidores, que recurren a la cancelación de sus reservas con cada vez más frecuencia. “En cuanto hay cambio de normativa o algo que influye en el ocio o el turismo, se suelen producir cancelaciones. Me consta que algunas sí se han producido, pero estamos a la expectativa para poder valorar”, esgrime.