Galicia a punto de salir de riesgo extremo según los positivos a 14 días pero la mejoría está decelerando

Los últimos datos del coronavirus en Galicia son buenos. Todas las medias de diagnósticos, positividad, casos activos y hospitalizados tienden a la baja. 

La mejoría está siendo más rápida que en anteriores olas y por ahora no hay señales claras de ningún rebrote pronto. 

Eso sí, empiezan a aparecer indicios de que la caída de positivos se ha detenido en torno a los 310 diarios.

Cuatro día seguido en que la cifra de positivos se mueve entre 345 y 307. Suficiente para seguir bajando la incidencia semanal, que cae a 90 positivos por cada 100.000 gallegos. Es la menor cifra en todo el año, tras 23 días seguidos de bajada.

Abriendo el plano a dos semanas, el descenso también continúa a buen ritmo. La incidencia acumulada a 14 días pasa de 276 a 255. Salvo sorpresa, mañana debería ser menor de 250. Eso implicaría que Galicia sale del nivel de riesgo extremo del semáforo estatal de alertas, según los valores para este indicador. Para el indicador semanal, Galicia salió de riesgo extremo a principios de semana.

La tasa de positividad sí ha perdido velocidad de caída. Tras el 4,5% de hoy lleva ya cinco jornadas estabilizadas en torno al 5%. Esto se debe en parte a que el SERGAS está haciendo muchos menos PCRs que en el pico de la ola. La media semanal llegó a casi 13.000 al día pero ha bajado hasta unos 7.400 al día. 

Con todo, mientras la tasa de positividad no se dispare, no se puede aducir que Sanidade complete demasiadas pocas pruebas. Cuando la Xunta se relajó en Navidad, cuando la media de pruebas se derrumbó a unas 5.000, la tasa de positividad sí aceleró rapidamente.

EVOLUCIÓN DE LOS CASOS ACTIVOS

La derivada de la curva de infectados sigue a la baja, lo que en principio descarta un rebrote pronto. Ahora bien, su descenso ha perdido brío en la última semana, lo que apunta a que a medio plazo la mejoría puede estancarse.

Hoy los casos activos caen un 8%, la mejor cifra en esta ola. Un gran porcentaje que contribuye a hundir la media semanal al -6,3%, que también es el mejor porcentaje de esta ola.

CONCLUSIONES

Con todas estas gráficas a nuestra disposición, podemos inferir que:

• La pandemia sigue perdiendo terreno. Su retirada es más brusca que en otras olas, como también lo fue su ascenso.
• No hay indicios claros de ningún rebrote pronto. La pérdida de velocidad de la derivada de la caída de casos activos no es una buena noticia, pero es hasta cierto punto normal a medida que hay menos infectados y, por lo tanto, menos pacientes a los que dar el alta.
• Tampoco es una buena noticia que los positivos lleven cuatro días atascados entorno al intervalo de 340-300. Sin ser una cantidad muy preocupante, el SERGAS puede gestionarla sin demasiada tensión, apunta a cierto posible estancamiento en la mejoría. Hay que tener en cuenta, eso sí, que gran parte de esos contagios provienen de brotes concretos y localizados, como por ejemplo los más de 60 del brote escolar de la escuela del barrio de Paradai de Lugo.
• La virulencia de esos brotes escolares y la tasa de letalidad a 30, que sigue cerca del máximo en toda la pandemia, robustece la hipótesis, ya reconocida por la Xunta, de que la peligrosa cepa británica está jugando un papel cada vez más determinante.

ÚLTIMOS DATOS POR ÁREAS SANITARIAS

Los casos activos vuelven a caer en todos los distritos del SERGAS. En lo referido a positivos, por vez primera este año no hay ninguna área que sume más de 100 nuevos diagnósticos. La peor cifra es de A Coruña y son 84.

El alivo empieza a ser notable en las UCIs. Por ejemplo, en A Coruña llegó a haber más de 80 pacientes críticos y ahora hay 59. En Ferrol alcanzaron casi los 30 y ahora tiene 16. Ahora bien, estas bajadas, desgraciadamente, son atribuíbles en alguna medida a la gran cantidad de fallecimientos y a la citada subida de la letalidad. Máis información a nivel municipal y de área sanitaria en unos minutos en Galiciapress.