Abanca busca despedir a 350 trabajadores días después de aprobar 56 millones de diviendos para Escotet
El Consejo de Administración de Abanca acordó abonar dividendos entre sus accionistas por un importe de 66,67 millones de euros en un pago el 2 de noviembre. De esos millones, 56 van para el banquero venozolano Juan Carlos Escotet, pues es el dueño del 84,75% de las acciones. Pagos así le han permitido ascender a quinto hombre más rico de España.
El total de lo cobrado por el magnate en dividendos supera los 615 millones desde 2015 y el benifico neto desde que se hizo con Novacaixagalicia -rescatada con dinero público- supera los 2.600 millones.
Pese a estos números, Escotet sigue recortando. Este verano cerró docenas de oficinas en el rural y ahora quiere reducir plantel argumentando que sobran cientos trabajadores tras comprar Novobanco y Bankoa.
Abanca y sindicatos han mantenido este miércoles una nueva reunión para abordar el ajuste de plantilla a raíz de la integración de Bankoa y Novo Banco. En concreto, la medida afectará a unos 350 trabajadores y a una docena de oficinas.
Todavía en el periodo informal de negociación, la empresa explicó esta jornada "las supuestas causas" para acometer estas salidas de personal, según informan fuentes sindicales consultadas por Europa Press.
A juicio de los sindicatos, Abanca parte de un "informe catastrofista sin fundamento", toda vez que los datos de Banco de España y de la propia entidad financiera son "positivos" y hay beneficios y reparto de dividendos.
Con la voluntad de acordar salidas "de mutuo acuerdo" por parte del banco, las fuentes sindicales consultadas ponen el foco en que no existen "garantías" pero sí "penalizaciones fiscales a las indemnizaciones" y exigen que cualquier salida se haga mediante prejubilaciones y sin "recortazo" del convenio.
Escribe tu comentario