A Mesa censura a Rueda y su "boicot" contra la oficialidad de la lengua en Europa

El reconocimiento del gallego y otras lenguas como oficiales de la Unión Europea ha quedado en suspenso. El Consejo de ministros de Asuntos Generales de la UE ha decidido retrasar la votación, algo que no ha sido bien recibido por plataformas en defensa de la lengua como A Mesa pola Normalización Lingüística, que ha visto en este retraso la postura de la derecha contra una medida que, aseguran, resulta "un paso imprescindible para su disponibilidad en todos los ámbitos" y que tendría un impacto positivo "en las relaciones comerciales y de consumo o en la contratación pública".

UNA DEMANDA HISTÓRICA

El presidente de A Mesa, Marcos Maceira, dirigió su mirada al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, al que acusa de "boicotear" la lengua. "Una vez más abdicó su deber como presidente de la Xunta de defender el gallego y prefirió mantenerse en su papel de súbdito del PP y Vox", reprendió Maceira, que recordó la presencia del hoy presidente de la Xunta en manifestaciones "con la ultraderecha contra el idioma".

"Demuestra de nuevo que solo tiene interés en pactar el entierro del gallego, operación en la que A Mesa no participará", denunció Maceira. En ese sentido, la organización ha protagonizado en los últimos años actuaciones para para reclamar el reconocimiento del gallego como lengua oficial en la UE, considerando que "el idioma es el mejor instrumento común que creamos todas y todos los gallegos y una necesidad para avanzar juntas todas las generaciones actuales en la cultura, en la educación, en el progreso social, económico y político".

Elsa Quintás fue una de las representantes que participó en noviembre de 2023 en una rueda de prensa en el Parlamento Europeo en la que la Red Europea de Igualdad Lingüística (ELEN) para reclamar el reconocimiento del gallego, el catalán y el euskera, valorando "el impacto muy positivo" que tendría su aprobación, pues "supondría un paso enorme hacia el reconocimiento y la normalización de las lenguas minorizadas, porque la oficialidad a nivel europeo es fundamental para proteger los derechos lingüísticos de las personas hablantes de estas lenguas".