Fiscalía investiga la balsa de lodos de Alcoa San Cibrao tras denuncia de ecologistas
La multinacional alega que la inspección es rutinaria, pero Ecoloxistas de A Mariña explica que en los últimos días remitió al Seproba imágenes de como el viento está llevando los contenidos fuera de la balsa. La Xunta aprobó hace poco la ampliación en cuatro metros de altura de la instalación.
La Fiscalía de Medio Ambiente ha realizado una inspección exhaustiva a la balsa de lodos de la planta que la multinacional estadounidense Alcoa gestiona en Xove, en la comarca de A Mariña de Lugo. Toda la operación contó con el apoyo de la Guardia Civil, efectivos de la Policía Judicial y agentes del Seprona, así como la presencia de un helicóptero que sobrevoló tanto la factoría como el depósito de lodos, generando expectación entre el vecindario.
Según fuentes de la Delegación del Gobierno, la actuación se engloba dentro de “inspecciones periódicas de Medio Ambiente sobre la balsa de lodos”, próximas al complejo industrial de San Cibrao (Cervo), cuya ampliación fue recientemente autorizada por la Xunta. Desde Alcoa, recalcan que la inspección estaba calendarizada y que "no reviste carácter excepcional", enmarcándose dentro del proceso habitual de colaboración con las autoridades medioambientales. La compañía insiste en que proporcionó toda la información requerida y la supervisión transcurrió “con total normalidad”, detallando que las autoridades acudieron para verificar la información previamente compartida desde la empresa.
Fuentes cercanas a la Fiscalía apuntan que el grado de detalle del control respondería a la verificación in situ dentro de una investigación en curso, cuyo origen no ha trascendido públicamente, aunque la empresa de Estados Unidos lo atribuye de momento al seguimiento ordinario de las instalaciones.
Por su parte, Ecoloxistas en Acción vincula la inspección con denuncias recientes. Ambientalistas explican que han remitido al Seprona de la Guardia Civil imágenes y vídeos de como el viento está levantando partículas de la balsa fuera del recinto. Califican la instalación de bomba ambiental, asegurando que está a punto de rebosar.
Este episodio coincide con la fase de rearranque de la planta de aluminio de San Cibrao, anunciada después del apagón eléctrico generalizado del pasado 28 de abril, y que sufre retrasos. La recuperación total de la actividad se pospone hasta 2026, cuando el acuerdo de viabilidad con los sindicatos fijaba la reactivación al 100% para octubre de 2025.
La balsa de lodos de Alcoa en Xove es una enorme instalación industrial situada próxima a San Cibrao (Cervo), concebida para el almacenamiento de los residuos generados durante la producción de aluminio y alúmina. Este año, la Xunta le concedió autorización para su ampliación en cuatro metros, dado que estaba cerca de su capacidad máxima.
.
Se trata de un depósito de grandes dimensiones donde se almacenan los lodos resultantes del proceso industrial, un residuo semi-líquido compuesto principalmente de óxidos y productos químicos utilizados en la transformación de la bauxita en alúmina. Por su ubicación y magnitud, la balsa requiere un estricto control por el riesgo potencial de filtraciones, rupturas o desbordamientos, que pueden afectar tanto a los suelos y acuíferos como al entorno natural próximo, incrementando el peligro de contaminación ambiental en caso de accidente.
A pesar de que la empresa Alcoa sostiene que la gestión de la balsa cumple la normativa y participa en inspecciones periódicas de las autoridades, las características de este tipo de instalaciones las convierten en focos de vigilancia constante por parte de Medio Ambiente y motivo de preocupación social y ecológica.
Escribe tu comentario