La ministra Montero, la reina de "sostenerla y no enmendarla"

Carmen P. Flores

Pedro Sánchez, que trata de disimular la tensión, está esperando la aprobación de los presupuestos para tomar decisiones. ¿Crisis de Gobierno? Aprovechará la marcha de dos ministras que irán de cabeza de lista en las municipales para reformar el Ejecutivo.

 

 

Llevamos días inmersos de lleno en los “errores” que lleva la ya famosa Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, más conocida como la ley del 'solo si es sí', que tanto alegró a su “autora” la ministra de Igualdad, Irene Montero, el día que fue aprobada en el Congreso hace ya unos cuatro meses.  Era precisamente en las puertas de la representación del pueblo, cuando la ministra eufórica decía: “Hoy es un día de victoria después de muchos años de lucha. El grito feminista del ‘solo sí es sí’, del ‘hermana, yo sí te creo’, se convierte en ley en nuestro país y el país feminista que somos se abre paso también en la arquitectura del Estado”. No era para menos, porque al fin había conseguido aprobar la Ley estrella de su controvertida gestión. 

 

La gran celebración pública y privada de Irene Montero por su “logro” de la Ley que teóricamente defiende a las mujeres y que terminó definitivamente con la distinción entre abuso y agresión sexual, definiendo que todo acto sexual sin consentimiento es una agresión, ha dado argumentos a los agresores sexuales que están condenados para solicitar la revisión de condenas. ¿Por qué lo pueden solicitar? Al reducir las horquillas de algunas penas en sus tramos mínimos se da pie a ello. ¿Nadie no se dio cuenta del fallo? Ahora  declaran  que lo habían dicho, juristas y magistrados.

 

Algunos partidos de la oposición claman por lo sucedido, también el PSOE y los partidos que dan soporte al ejecutivo de Pedro Sánchez, que todos piden que se revise y corrija lo que haya que corregir, que sería lo correcto, pero todo en Irene Montero es un poco surrealista, o mejor dicho reflejo de una incompetencia total. Ella afirma que la Ley es correcta . Montero no está preparada para el cargo que ostenta y si a eso se le añade que no acepta críticas, es un cóctel perfecto para liarla un día sí y otro también. Nadie del   entorno de la ministra se atreve a decirle lo que hace mal por miedo a que los envíen a casa sin sueldo, y el resultado es el que todos conocemos. Montero hace buena la frase “sostenerla y no enmendarla”.

 

La soberbia y la irresponsabilidad de la ministra es tal que, ante las críticas, no se le ocurre mejor idea que decir “que los jueces son machistas” - otros compañeros suyos de partido ahondan más y los catalogan de “fachas con toga”-. Todo para atemperar la situación. La respuesta no se ha hecho esperar: las asociaciones de jueces , todas, han criticado las declaraciones de Montero.  El lío está montado y en lugar de concordia y voluntad de templar “gaitas”, los podemitas se vuelven pirómanos sin darse cuenta que el viento ha cambiado de dirección y están quemando viva a Irene Montero y de paso al gobierno, especialmente a Pedro Sánchez, que le afecta directamente el desgaste que está teniendo con este tema que ha generado alarma social.

 

¿Qué va a suceder ahora? En el caso de la Ley, si continúan las presiones, tendrán que introducir las modificaciones que hagan falta. Mientras, la Fiscalía General ha dictado este lunes un decreto para que los fiscales den “una respuesta uniforme” a las revisiones de condenas firmes suscitadas por la entrada en vigor de la conocida como 'ley del solo sí es sí', estableciendo que no se modificarán cuando la pena impuesta pueda dictarse con el nuevo marco penal uniforme a las revisiones de condenas firmes suscitadas por la entrada en vigor de la conocida como 'ley del solo sí es sí', estableciendo que no se modificarán cuando la pena impuesta pueda dictarse con el nuevo marco penal. Es una decisión que traerá polémica tanto en la judicatura como en los partidos y sectores de la sociedad, que no tengo claro que sirva para tranquilizar a la ciudadanía y especialmente a las víctimas de abusos sexuales.  ¿La decisión de la Fiscalía ha sido tomada para poner paños fríos en el gobierno?

 

En cuanto a Irene Montero, se le ha cerrado la puerta a aspirar a encabezar la lista de Podemos a las elecciones generales, cosa que ha molestado a su marido Pablo Iglesias, que estos días anda desatado dando a derechas e izquierdas. Mientras, Pedro Sánchez, que trata de disimular la tensión, está esperando la aprobación de los presupuestos para tomar decisiones. ¿Crisis de Gobierno? Aprovechará la marcha de dos ministras que irán de cabeza de lista en las municipales para reformar el Ejecutivo. Decía el Dalai Lama que “cuando te das cuenta de que has cometido un error, toma medidas inmediatas para corregirlo”. Pues eso.

 

La ministra de Igualdad, Irene Montero.
La ministra de Igualdad, Irene Montero.


 

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