Puigdemont: primero la amnistía, después el referéndum

Como era previsible, la Comisión de Justicia aprobaba este jueves la Ley de Amnistía, con los votos a favor del PSOE, ERC, Junts, Sumar, EH Bildu y el PNV. Concluye de este modo la primera parte de esta nueva ley que traerá cola. No terminan aquí los problemas, sino que es precisamente ahora cuando empezarán para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y por lo tanto al PSOE ¿Le valdrá la pena el sacrificio que ha sometido a su partido? Esa pregunta se la hacen miles de militantes y votantes socialistas. El tiempo será quien diga si ha sido bueno o no proponer la Ley de Amnistía y lo que ello representaba para los implicados en todo el entramado del procés.

La aprobación se ha producido después de un mes en el que Junts le dio la estocada a los socialistas en el Congreso al no apoyar la Ley de Amnistía cuando parecía que estaban de acuerdo. Tras las diversas reuniones mantenidas por socialistas con los enviados de Puigdemont que finalmente han arañado algunas peticiones más que favorecen al huido y aludiendo al informe preliminar - como bien dice su nombre no es el definitivo- de la Comisión de Venecia sobre la amnistía y el derecho europeo e internacional para guardarse las espaldas el Gobierno de España.

El texto final pactado por socialistas y Junts modifica los dos delitos que preocupan a Carles Puigdemont y que le impedían volver a España: el terrorismo y la traición. Los cambios introducidos protegen muy bien al expresidente respecto a los casos que se instruyen en los juzgados: Tsunami y Voloh.

Los socialistas siguen en ese papel de suavizar lo que pueda opinar Europa, que están preocupados con la malversación y por los delitos de corrupción que son evidentes. Para curarse en salud, el texto definitivo apunta que “no se perdonará en ningún caso el enriquecimiento personal”, pero no habla de la malversación de dinero público como se hizo en todo el procés ¿Con qué dinero se sufragó todo? Alguien tendrá que explicarlo - ¿los jueces?-.

Los problemas van a seguir: en el Senado, con los partidos de la oposición, los jueces, Europa y sobre todo Junts que, ante el segundo triunfo frente a Sánchez, se ha envalentonado de lo lindo. El partido de Puigdemont explicaba a los medios que, como había avisado en su día, todo se aprobará pieza a pieza, y evidentemente que cada una de ellas tendrá su precio. La siguiente, los presupuestos. ¿Qué pedirán a cambio, el referéndum? Mientras los interlocutores socialistas echaban al aire las campanas diciendo que la ley iba a servir para la “reconciliación” de Catalunya y en España, Turull en los bajos del limbo declaraba que esta ley no soluciona el conflicto político entre Catalunya y el Estado, porque según sus palabras, “nuestro objetivo de conseguir la independencia sigue tan viva como el mismo 1-0”.

Pese a las palabras de Turull, reconoce el líder postconvergente que la Ley de Amnistía va a permitir que en junio, Puigdemont, Comín y compañía entren “triunfales” en Catalunya. Como decíamos en otro artículo, Puigdemont y Comín - lo confirmaba este último este jueves- encabezarán la lista a las elecciones europeas. Todo un triunfo. ¿Irá también en la lista la hermana de Comín, Betona? Puede que no , saca más rendimiento con el negocio que tiene montado gracias a sus cambios ideológicos y la logística que presta, cobrando. La pela es la pela, y el procés está siendo un negocio muy lucrativo para unos cuantos espabilados. Decía el político argentino Domingo Faustino Sarmiento que “cuando los hombres honrados se van a su casa, los pillos entran en la del gobierno”.

Con este panorama que tiene por delante Sánchez, con el PP que ha declarado la guerra al Gobierno, los jueces que se sienten ninguneados y con las espadas en alto y los pronunciamientos del parlamento y la justicia europea,   la ebullición política y social está servida. Para que la cosa se anime más, el caso Koldo echa más presión al Ejecutivo. ¿Cómo piensa el presidente Sánchez apagar el fuego que tiene en varios frentes? ¿Quiénes serán los bomberos para que él no se acabe achicharrando? Los próximos días se irán aportando más elementos que puedan ser o no la salida a los problemas que rodean a Pedro Sánchez.