#Claves de la semana

Feijóo pactó que gobernase el 3º más votado a cambio de que Jácome no compitiese con él en las autonómicas

La oposición gallega recuerda que la propuesta del líder conservador  español de que gobierne el más votado tiene poca credibilidad mirando sus antecedentes en Galicia. 


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En la ciudad de Ourense, Feijóo aprovechó el cambio de cromos entre Jácome -tercero más votado en las locales- y Baltar -que había perdido la mayoría en la Deputación- para asegurarse que Democracia Ourensana no le restaría votos en los comicios a la Xunta.

 

Jácome cumplió  su parte, pero el pacto estalló posteriomente, tras fichar Baltar a una ex-de Ciudadanos, condenando a los 100.000 habitantes de Ourense a ser gobernados por solo cuatro ediles.

 

Rajoy, Rueda y Puy salen en defensa de la propuesta de Feijóo, aunque el tono general no es de mucho convencimiento, más allá de decir que es un plan a ser debatido por todos.

 

Feiju00f3o, Ju00e1come y Baltar en una foto de archivo de EP
Feijóo, Jácome y Baltar en una foto de archivo de EP

 

La lista más votada debe gobernar siempre en ayuntamientos, diputaciones, autonomías y Gobierno de España. Esta propuesta de Alberto Núñez Feijóo está centrando gran parte del debate político estatal esta semana. 

 

En realidad es una idea antigua. El conservador la enarboló en Galicia en numerosas ocasiones. También es cierto que nunca la aplicó cuando tuvo oportunidad. No hay ningún registro de que el PPdeG se haya apartado de ningún gobierno en favor de otro partido a ningún nivel cuando Feijóo era su líder. 

 

Feijóo siempre culpó, eso sí, a los demás partidos, sobre todo a los socialistas. En este sentido, el guion que está aplicando el PP en España es un relato cuyos previsibles giros argumentales y consecuencias ya conocen los gallegos de primera mano, sobre todo los ourensanos.

 

DE ALCALDE LETAL A SOCIO

En la ciudad de Ourense gobierna el polémico Gonzalo Pérez Jácome pese a ser la tercera lista más votada. Lo encumbró el PP a cambio de que el líder de Democracia Ourensana mantuviese a la dinastía Baltar en la presidencia de la Deputación de Ourense. El PP se había quedado a uno de la mayoría por los que los diputados localistas podían, potencialmente, desalojar al baltarismo.

 

El sorprendente cambio de cromos llegó pese a que Feijóo había tildado antes de la campaña una hipotética alcaldía de Jácome de letar para la ciudad de Ourense. Una vez cerrado el pacto entre la familia Baltar y Jácome, Feijóo no tardó en bendecirlo. 

 

De paso, él también sacó provecho políticamente. A través de una de su secretario de organización -Miguel Tellado, hoy también en Genova- arrancó al localista no presentarse ni a las elecciones autonómicas ni a las elecciones europeas.

 

Feiju00f3o y Ju00e1come cuando el alcalde de Ourense dijo que le pedu00eda consejos de gestiu00f3n tras una reuniu00f3n en la Xunta en una foto de archivo de EP
Feijóo y Jácome cuando el alcalde de Ourense dijo que le pedía consejos de gestión tras una reunión en la Xunta en una foto de archivo de EP

 

JÁCOME CUMPLE PERO NO RECIBE LO PROMETIDO

Jácome cumplió. De hecho, pidió el voto para Feijóo en las gallegas.  Si Democracia Ourensana se hubiese presentado a las autonómicas hubiese tenido opciones de rascar un escaño, algo potencialmente muy peligroso pues la mayoría absoluta de Feijóo. En aquel momento era más exigua que la actual (41 antes y 42 ahora, el corte está en 38). 

 

¿Cumplieron el PP y Feijóo con Jácome? Cumplieron en lo inicial, básico e imprescindible, nombrarlo alcalde. El resto de pacto acabó en papel mojado, en gran medida porque Baltar maniobró fichando a una ex de Ciudadanos para el PP, recuperando la mayoría absoluta en el pleno provincial.

 

 Democracia Ouresana justificó el acuerdo con unas serie de inversiones para la ciudad que hoy siguen existiendo solo en el papel. Del parque acuático no se ha movido ni un grano de arena. El Centro de Inteligencia Artificial existe, pero solo gracias al empeño de Jácome, la Xunta ha pasado de él, como quedó en evidencia cuando apoyó que A Coruña y no Ourense fuese la sede de la AESIA. 

 

Así las cosas, Jácome empezó la legislatura loando a Feijóo -dijo que le pidió consejos de gestión- y la acabó dando el pacto por muerto y prometiendo competir en las próximas autonómicas.

 

LA IZQUIERDA GALLEGA NO SE LO CREE

Con estos antecedentes sobre la mesa,  es normal que la propuesta recalentada para el debate estatal haya suscitado escepticismo, cuando no risa, entre los otros partidos gallegos.

 

La líder de Bloque interpreta que al ex-presidente de la Xunta  "no le dan las cuentas". Ana Pontón añade que Feijóo  "tiene un problema con la democracia" proponiendo que gobierne una "minoría" en vez de que se forme  una mayoría entre varios socios, que es una opción avaldaa por la ley electoral cuando no hay mayorías absolutas.

 

Por su parte, los socialistas le recuerdan que  "no está en condiciones de dar lecciones ni de hacer propuestas de regeneración democrática". El portavoz del Grupo Socialista en la Cámara gallega, Luis Álvarez, le ha esperado que si tanto cree en esa propuesta debería dejar de cuestionar la legitimidad del gobierno de Pedro Sánchez, pues el PSOE fue el más votado en las últimas generales.

 

APOYOS DESDE EL PPDEG

Así las cosas, los únicos apoyos que ha suscitado el plan de Feijóo llegan, como era esperable, desde el PP. Uno de sus mentores, Mariano Rajoy, ha tildado la oferta de "excelente". El pontevedrés ha recordado es un plan que tiene "años". Lo hizo durante su participación este lunes en un acto en la Facultad de Derecho de la USC:

 

 

Alfonso Rueda ha acompañado al ex-presidente de España en la Facultad. El presidente de la Xunta argumenta que no se puede forzar al PP a aplicar su propio plan si el resto de partidos no están de acuerdo. 

 

Esta es la clave del argumentario conservador ante el probable fracaso de la propuesta a nivel estal. La culpa de que no salga adelante no será de los 'populares' -aunque no la apliquen motu proprio-, será de los demás. De paso, el PP tendrá un argumento para justificar pactos que pueden resultar agrios para parte de sus electores, como fue el Baltar-Jácome y puede ser el Feijóo-Abascal (Vox).

 

Por su parte portavoz parlamentario del PPdeG ha destacado, que esta opción "trata de reforzar las instituciones democráticas" y de "dar estabilización a los gobiernos, sobre todo, en el ámbito municipal".  " se presenta como un debate y una opción a ser valorada por la sociedad española" añade Pedro Puy Fraga.

 

¿REGENERACIÓN U OPORTUNISMO?

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha presentado este lunes en Cádiz un plan de regeneración, que incluirá propuestas como dejar gobernar a la lista más votada en los ayuntamientos. El PSOE y otros partidos han calificado de "oportunista" esta medida.

 

La portavoz del PP Cuca Gamarra creen que el PSOE la rechaza porque temen que Pedro Sánchez quede segundo en las elecciones generales de final de año. La ministra de Educación Pilar Alegría ha respondido que ni el propio PP se cree su plan y que hay mútiples ejemplos de decisiones opuestas.

 

 

La vicepresenta Yolanda Díaz  (Sumar) y portavoces de Ciudadanos, Podemos, Más Madrid y de Vox también la han criticado. 

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