No de Moncloa a primeras subvenciones a Altri pone en jaque la viabilidad de la celulosa

El Gobierno central ha excluido a Altri de la lista de beneficiarios de los fondos europeos del PERTE de descarbonización, negando así los 30 millones de euros solicitados por la compañía portuguesa para su polémico proyecto de macrocelulosa en Palas de Rei. Esta decisión, adelantada esta noche por Eldiario, supone el primer rechazo claro del Ejecutivo de Pedro Sánchez a la aspiración de Altri de recibir financiación pública para instalarse en Galicia, en un contexto de fuerte contestación social y ambiental.

La negativa del Gobierno se produce tras meses de dudas sobre la adecuación del proyecto a los requisitos del PERTE, especialmente en cuanto a su impacto ambiental y su escasa aportación a la cadena de valor gallega. Desde el PSdeG-PSOEse había señalado entre líneas que el modelo propuesto por Altri no cumple con los niveles tecnológicos ni con el impacto en descarbonización exigidos para este tipo de ayudas, y que Galicia seguiría asumiendo los costes medioambientales sin obtener los beneficios de una industria de mayor valor añadido. La decisión conocida ahora es la primera indicación de la Administración del Estado, controlada por los socialistas. asume también un punto de vista similar.

Por su parte, la Xunta de Galicia, pese a haber otorgado recientemente el permiso ambiental al proyecto, ya había advertido que no concederá financiación específica a Altri, remitiendo toda la responsabilidad al Gobierno central y a los fondos europeos.. El presidente Alfonso Rueda insiste en reclamar igualdad de trato respecto a otras comunidades, pero mantiene que la Xunta no aportará ayudas directas a la iniciativa, que cuenta con un enorme rechazo en Palas de Reis y en toda la comarca de A Ulloa.

La viabilidad del proyecto queda así en entredicho, ya que la propia empresa ha reconocido en varias ocasiones que la inversión privada prevista —mil millones de euros— depende en un 25% de la obtención de fondos públicos. Es decir, que unos 250 deberían salir del bolsillo de los ciudadanos, sobre todo procedente de los fondos Next Generation de Bruselas. Por ahora, los socios han aportado menos del 3% de los 1.000 millones estimados para la primera fase de la celulosa.

Sin la inyección de dinero europeo y sin apoyo autonómico, Altri ve seriamente comprometida su implantación en Galicia, y la compañía ha advertido que podría trasladar la inversión a otro territorio si no consigue las ayudas solicitadas. Asia y Sudamérica son dos de las alternativas indicadas por su CEO.

Mientras tanto, el proyecto sigue generando una fuerte oposición social y política en Galicia, con multitudinarias manifestaciones y críticas de colectivos ecologistas, vecinos y partidos como el PSdeG, BNG, Sumar o Podemos que denuncian el elevado consumo de recursos y el riesgo ambiental que supondría la macrocelulosa para la comarca da Ulloa y la ría de Arousa. El PP se ha quedado solo en su defensa. La controversia a buen seguro que saltará mañana en el Debate do Estado da Autonomía.