Doce días de huelga en Ence Pontevedra por la amenaza de despidos

La plantilla de Ence ha decidido en asambea  este jueves emprender una huelga de 12 días a partir de la próxima semana en respuesta a la decisión de la dirección de la empresa de impulsar salidas pactadas tras los malos resultados registrados este año. 

La medida fue aprobada en asamblea por amplia mayoría y supone un nuevo frente para la compañía, que atraviesa uno de los momentos más tensos de los últimos ejercicios.La paralización afectará no solo a la fábrica de Pontevedra, sino también al resto de centros productivos y a las industrias auxiliares que dependen directamente de la celulosa. 

El comité de empresa tiene previsto ofrecer al mediodía una rueda de prensa para detallar el alcance de las movilizaciones y los servicios mínimos que se mantendrán durante el paro.Ence argumenta que los resultados del ejercicio han sido “claramente insuficientes” debido a la bajada de la demanda internacional y al encarecimiento del transporte marítimo, por lo que la dirección considera necesario acometer ajustes laborales para “garantizar la viabilidad futura” de la compañía. Sin embargo, desde el comité se denuncia que las salidas voluntarias que la empresa plantea son, en realidad, despidos encubiertos, y que la plantilla ya ha soportado años de recortes sin que se hayan traducido en mejoras sostenibles.

Los representantes sindicales aseguran que la empresa utiliza los resultados como posición de fuerza para imponer una reducción de plantilla y desmantelar progresivamente una estructura de empleo estable y especializado.

Alegan que los trabajadores han asumido medidas de flexibilidad durante años, incluyendo ampliaciones de jornada y congelaciones salariales, sin que eso haya evitado la actual situación. “La plantilla no puede ser siempre la variable de ajuste”, lamentan fuentes del comité.

Además, la huelga llega en un contexto particularmente difícil para Ence, que aún mantiene un frente abierto con los transportistas encargados de suministrar eucalipto a sus fábricas.

Los camioneros llevan semanas sin transportar madera como protesta por la bajada de tarifas aplicada por la empresa, que, según el sector, hace inviables muchas rutas. Esta paralización del suministro ha limitado la actividad de las plantas y generado tensiones en la cadena logística.Desde las asociaciones de transportistas, se reclama una revisión urgente de las tarifas y la firma de acuerdos estables que garanticen márgenes de rentabilidad. Acusan a la compañía de haber aprovechado la ralentización de la demanda para reducir unilateralmente los precios del servicio, lo que ha llevado a decenas de autónomos y pequeñas empresas a suspender su actividad.

La dirección de Ence, por su parte, insiste en que las tarifas revisadas reflejan el nuevo escenario de costes y que mantiene abiertos los canales de diálogo con los representantes del sector.