Personal de la UCI del CHUO critica las nuevas instalaciones y dice que suponen "un grave riesgo" para los pacientes

Personal de la UCI del Complejo Hospitalario de Ourense han trasladado en un escrito a la gerencia del área sanitaria y del Sergas, entre otros, su inquietud por las nuevas instalaciones de cuidados intensivos que, aseguran, "suponen un grave riesgo para la seguridad de los pacientes".

Tras un mes de trabajo en los nuevos espacios, apuntan en la misiva, han "detectado problemas que contribuyen a dificultar el trabajo individual y en equipo que se realiza" en la UCI, así como "falta de cumplimiento de los Estándares y Recomendaciones para las unidades de cuidados intensivos" que recoge el Ministerio de Sanidad.

Entre otras cuestiones, apuntan que no se cumple la "superficie útil mínima recomendada" de las habitaciones, que no hay visión directa "de la totalidad de los recursos de la sala" o que existe una "identificación inadecuada de las alarmas en los monitores", además de "problemas ergonómicos" para los profesionales y formación "insuficiente" sobre las nuevas tecnologías del servicio, entre otras cuestiones.

Los trabajadores también consideran que la distribución de personal en la UCI "es insuficiente" y "no se ajusta a los ratios recomendados tanto por parte del Ministerio de Sanidade como por la Sociedad Europea de Cuidados Intensivos".

Desde el área sanitaria de Ourense, por su parte, han apuntado que tanto las infraestructuras como el equipamiento y la dotación de personal de la UCI de Ourense "permiten garantizar la seguridad y buen manejo clínico de los pacientes, mejorando significativamente los recursos a disposición de los profesionales para una buena atención, acorde con los requerimientos más exigentes".

Además, apuntan que "no hay reducción de personal ni aumentos de cargas de trabajo", si no "más bien al contrario, teniendo en cuenta el nuevo equipamiento y tecnologías de apoyo". Además del personal facultativo, de fisioterapia y celadores, la UCI cuenta con ocho enfermeras, seis técnicos de cuidados por turno, una coordinadora de apoyo de enfermería y una supervisora de enfermería, ambas en turn de mañana. La ratio de la UCI es siempre inferior a tres pacientes por enfermera de turno, aseguran.