Moraña equipara el luto por la mujer calcinada y por su pareja sospechoso de prenderle fuego

El Ayuntamiento de Moraña, gobernado por el PP, ha decretado tres días de luto por la muerte de José Ramón G.C. y Marisol C.P., fallecidos en un presunto caso de violencia machista en Campo Lameiro. La decisión ha desatado fuertes críticas de colectivos feministas y del BNG, que denuncian que se está equiparando a la víctima con su agresor.

La asociación feminista As Moiras, con sede en el propio municipio de Moraña, ha expresado su malestar por la decisión municipal, que considera “tremendamente indignante”. Desde el colectivo critican que se rinda homenaje de igual forma al hombre que presuntamente asesinó a su expareja antes de morir ambos calcinados. Para la organización, este gesto supone un retroceso en la lucha contra la violencia machista.

La reacción de As Moiras llega después de que el consistorio decretase que las banderas ondeen a media asta y se suspendan los actos públicos durante tres días. El gobierno local trasladó sus condolencias a los familiares de ambos, presentándolos como “dos vecinos desaparecidos”, sin diferenciar entre víctima y agresor.

La asociación recuerda que Marisol C.P. estaba incluida en el sistema de seguimiento VioGén, con un riesgo alto registrado y una orden de alejamiento vigente contra su expareja. Además, José Ramón contaba con antecedentes por violencia de género, por lo que la entidad considera que el Ayuntamiento está ignorando datos esenciales.

As Moiras reclama una rectificación urgente por parte del gobierno municipal y ha instado al Ayuntamiento a sumarse a la concentración convocada para este jueves por la tarde en repulsa por el crimen. Desde el colectivo denuncian que este tipo de decisiones institucionales invisibilizan a las víctimas y socavan los avances sociales frente a la violencia machista.

La entidad también exige a las administraciones un compromiso real con esta problemática, y pide que se deje de actuar con medidas simbólicas y vacías, como declaraciones institucionales esporádicas o gestos sin implicación real. Consideran que la lucha contra la violencia estructural debe ser una prioridad política absoluta.

Por su parte, el BNG se ha sumado a las críticas y ha calificado de “inapropiado e indignante” que se rinda homenaje conjunto a una víctima de violencia machista y a su agresor. Para los nacionalistas, este gesto envía un mensaje peligroso a la ciudadanía, al poner en el mismo plano a quien sufrió la violencia y a quien la ejerció.

Los cuerpos de Marisol C.P. y José Ramón G.C. fueron hallados calcinados la semana pasada en el municipio vecino de Campo Lameiro, un suceso que está siendo investigado por la Guardia Civil como un posible caso de violencia de género con resultado de asesinato de la mujer y suicidio del hombre. El entorno de la víctima y el historial del agresor, condenado en el pasado por violencia de género, apuntan claramente en esa dirección.

Este caso ha provocado un fuerte impacto social en la comarca, tanto por la brutalidad de los hechos como por las reacciones institucionales que le han seguido. Diversos colectivos reclaman una revisión profunda de los protocolos de actuación y prevención en materia de violencia machista.