1.057 días de espera en los juzgados de lo social

El colapso en el sistema judicial gallego ha llegado hasta tal punto que las citaciones para celebrar los juicios superan los tres años de espera.

El tiempo de espera en los juzgados gallegos ronda los tres años

El sistema judicial de Galicia no puede asumir la carga de trabajo que tiene atrasada. Los juzgados siguen acarreando los males provocados por el parón de la huelga de funcionarios de justicia de 2018, que dejó hasta 17.000 actos judiciales bloqueados. Mala dotación, poco personal, retrasos, juicios que se suspenden de forma progresiva…muchos son los males que azotan a la Justicia gallega, lo que ha llevado a situaciones como la que denuncia en redes sociales Pedro Ortega Ludeña, graduado en derecho.

A la raíz de la queja del abogado, varios usuarios publicaron otras capturas de citaciones judiciales, también con larguísimos plazos de espera.

Reclamación de salarios también en A Coruña 🙈🙈🙈 pic.twitter.com/23zPHLHhgd

— Marssbel (@Marssbel) 13 de marzo de 2019

En este caso, el abogado expone el caso de un afectado cuya comparecencia de las partes implicadas en un juicio está fijada para el día 8 de febrero, a las 10:10 horas, de 2022. Para entonces, Trump ya habrá agotado su legislatura en la Casa Blanca y tal vez no siga al frente del gobierno de Estados Unidos, las personas nacidas en 2004 ya podrán conducir y las selecciones de medio mundo estarán luchando por lograr un pase para el Mundial de Qatar de ese año. Así, las personas citadas habrán esperado 1.057 días hasta la celebración del juicio.

COLAPSO

Los retrasos en jurisdicción social no son algo nuevo. De hecho, es una de las quejas más recurridas por parte de los letrados del sistema judicial gallego, que ven como las causas se eternizan, con las consecuencias que tiene para las partes implicadas.

El colapso está causado en gran medida, aunque no en su totalidad, por el parón en la Justicia de 2018. Los tres meses de huelga dejaron muchos procesos parados y causas pendientes. Esto obligó a la Xunta y a los organismos implicados a elaborar un plan de recuperación para desatascar los asuntos acumulados durante el parón. Con todo, una vez finalizada la segunda fase del plan, se estudia la posibilidad de activar una tercera fase, en vistas de que la situación de colapso se mantiene en el tiempo.

Para intentar normalizar la situación, se ha aumentado la carga de trabajo por la tarde, los funcionarios de justicia han realizado cerca de 60.000 horas extra y se aceleraron los procedimientos de notificación y registro para agilizar la salida del trabajo acumulado. Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos, los resultados no han sido todo lo buenos como cabía esperar, por lo que todavía se arrastran atrasos en justicia.

Otro aspecto a tener en cuenta es la falta de más Juzgados de lo Social, otra de las reivindicaciones de los juristas. Este es el caso de ciudades como Lugo, que a pesar de contar con el beneplácito de la Xunta y el Tribunal Superior de Justicia de Galicia para la construcción de un nuevo espacio, fue el propio Ministerio de Justicia el que tumbó la propuesta, dejando en el aire miles de causas que esperan ser resueltas.

Ahora parece que el ministerio ha dado marcha atrás en su decisión y todo parece indicar que autorizará la construcción del juzgado lucense, además de uno nuevo en Santiago de Compostela. La cuestión ahora con las causas sin resolver no es tanto el cuándo, sino si finalmente la justicia llegará, como muchos temen, demasiado tarde.