La Xunta avisa que actuará "con toda rotundidad" frente a "irregularidades" en residencias de mayores

Fabiola García afea a la Vicepresidencia de Iglesias que "se desentienda" de los centros y la oposición critica los "recortes" del PP en 11 años

La conselleira de Política Social, Fabiola García, ha avisado a todas las residencias de mayores de Galicia y a los familiares de sus usuarios que la Xunta y sus servicios de inspección actuarán "con toda rotundidad" frente a cualquier "irregularidad" que detecte.

"Defiendo el trabajo responsable que se hace en las residencias, pero a las familias quiero dejarles muy claro que si la Xunta detecta una irregularidad en cualquier centro no dudaremos en tomar todas las medidas que sean necesarias. Todas, absolutamente todas", ha advertido la conselleira este viernes, durante su comparecencia en la Diputación Permanente del Parlamento.

Este mismo viernes, los últimos datos de su Consellería sobre contagios de coronavirus en centros de mayores reflejaban que continúan en aumento, hasta un total de 607 positivos --442 en residentes y 165 en empleados--, a los que se suman 27 fallecidos dentro de las mismas instalaciones.

"Desgraciadamente se detectarán y diagnosticarán nuevos casos, porque la pandemia aún se está extendiendo dentro y fuera de las residencias", ha augurado Fabiola García, quien ha garantizado que para la labor de detección "se realizarán centenares de pruebas" de COVID-19 cada día en los geriátricos.

Además, durante su comparecencia, la conselleira ha afeado a la Vicepresidencia Segunda de Derechos Sociales, cuyo titular es Pablo Iglesias, que se "desentienda" de los centros de la tercera edad en el contexto de esta crisis sanitaria por el coronavirus.

"Ya nos quedó claro que las residencias tan solo eran cosa de la Xunta, porque la colaboración del Gobierno central fue cero", ha afirmado García.

Y es que, según ha explicado, el domingo 22 de marzo la Vicepresidencia de Derechos Sociales anunció que la Unidad Militar de Emergencias (UME) acudiría a estas residencias a efectuar labores de apoyo y "dos días después dijo que no, que iría solo a desinfectar". "Algo que le agradezco, pero no era lo que se prometió", ha añadido García.

"ANTICIPACIÓN" Y "CONTUNDENCIA"
Asimismo, la conselleira ha reivindicado la "contundencia" y la "anticipación" de la Xunta con respecto a las residencias de mayores y centros de discapacidad, ya que antes de decretarse el estado de alarma se prohibieron las visitas y antes de que Galicia registrarse casos en asilos su Consellería ya "había enviado los protocolos".

Esta misma semana, su departamento decidía intervenir dos residencias privadas, las de DomusVi en Aldán (Cangas) y Barreiro (Vigo), para convertirlas en integradas por el alto número de positivos detectados --entre ambas suman, según los últimos datos, casi 200--, una medida "pionera en España" y adoptada "el mismo día" que se tuvo conocimiento de los resultados de los test.

Ahora, con un total de cuatro residencias integradas en la Comunidad --las de Cangas y Vigo, junto a la Porta do Camiño en Santiago y la de la Fundación San Rosendo en Baños de Molgas-- que centralizan positivos entre ancianos, la conselleira ha explicado que es "la autoridad sanitaria" la que, "basándose en criterios médicos, elige el modo de proceder": mantenerlos en el geriátrico de origen, trasladarlos al centro integrado o su hospitalización.

No en vano, Fabiola García ha tenido también palabras para valorar el trabajo de los empleados de las residencias y su "muy elevado" conocimiento de los protocolos a seguir, a pesar de los "cambios de criterio" del Gobierno del Estado.

"PRIVATIZACIONES" Y "RECORTES"
Por su parte, los grupos de la oposición --PSdeG, Grupo Común da Esquerda, BNG y Grupo Mixto--, han cuestionado esa "prevención" de la que presume la Xunta y han afeado no solo los "recortes" y las "privatizaciones" en servicios sociales llevados a cabo PPdeG en 11 años, sino también que la Televisión de Galicia no estuviese emitiendo en directo la comparecencia de la conselleira.

El secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha pedido tanto al Ejecutivo gallego como al PP que no pretendan "ponerse medallas que no corresponden". "Galicia decretó el estado de emergencia después de que el presidente del Gobierno (Pedro Sánchez) anunciase en televisión que decretaría el estado de alarma. No lo critico, simplemente hago una crónica de los hechos", ha explicado.

Además, el líder socialista ha apelado a "revisar el modelo de residencias", lo que conllevaría también "revisar los conciertos" y "el control" sobre las privadas. En este sentido, ha censurado que "después de 11 años del gobierno del PP no hay nuevas plazas públicas" en geriátricos.

Antón Sánchez, del Grupo Común da Esquerda, ha apuntado este mismo dato y ha añadido que lo que hizo la Xunta fue "concertar" plazas en centros privados de "empresas amigas" del PP.

A esta crítica a las "políticas de privatización y de mercantilizar el bienestar de los mayores" ha añadido las "irregularidades" detectadas por el Consello de Contas, señaladamente en la dotación de recursos humanos, que "no se corrigieron" ni se iniciaron "expedientes sancionadores" contra las empresas.

"PLAN DE CHOQUE"
La diputada del BNG Montse Prado ha recordado que trasladó al Ejecutivo autonómico un "plan de choque" en residencias con una serie de medidas "fundamentales", entre ellas la realización de test que abarquen "el 100 por 100" de los usuarios y los trabajadores y la intervención "de todos" los geriátricos de la Comunidad.

"Todas estas propuestas las considerábamos precisas y de sentido común (...) y ustedes no tuvieron absolutamente ninguna prisa para ponerlas en marcha", ha afeado la nacionalista, para seguidamente decir que Galicia "tuvo días de ventaja" con respecto al resto del Estado porque la ola de contagios "llegó con retraso".

Desde el Grupo Mixto, Davide Rodríguez ha afirmado que las dificultades de los geriátricos para hacer frente al COVID-19 son "consecuencia de años de desmantelamiento y servicios públicos". "No nos valen las excusas de la Xunta de que la culpa es de Madrid y del Gobierno de Sánchez", ha aseverado, ya que el Estatuto de Autonomía de Galicia "recoge la competencia exclusiva en política social".

Frente a la oposición, el portavoz del PP en el Parlamento gallego, Pedro Puy, ha valorado la actitud de la Xunta de "no dar ninguna vida por perdida" y ha garantizado que "se está haciendo lo que se puede".

Puy no ha pasado por alto las críticas del resto de grupos sobre el modelo de bienestar y ha recordado que la ley gallega de servicios sociales fue aprobada durante el bipartito de PSdeG y BNG, el cual ha calificado como "moderno" al introducir la titularidad de estos centros por parte de entidades sociales sin ánimo de lucro.

EL CORONAVIRUS "NO PREGUNTA ANTES DE ENTRAR"
Sobre este debate, la conselleira de Política Social ha apuntado que el coronavirus "no pregunta antes de entrar" ni distingue "la titularidad" de las instituciones. "Comprendo que su ideología implique odiar mayoritariamente lo privado. No lo comparto, pero lo respeto. Lo que no respeto es utilizar esta crisis para alimentar sus dogmas", ha afeado.

Acerca de las demandas de información constante por parte de las familias de los usuarios, García ha dicho que le "consta" que las residencias de titularidad autonómica "se tuvo un contacto cotidiano" con ellas.

Así, ha añadido que "la primera instrucción" que dio su Consellería tras intervenir los centros de Aldán y Barreiro "fue que se llamase a las familias para que les diesen una información veraz" sobre la situación.

Durante su turno de cierre, la conselleira de Política Social ha lamentado que el resto de partidos "continúen con su discurso ideológico" cuando en esta crisis "lo primero es la gente": "Ya sé que ustedes son nacionalistas o de izquierdas, pero es que en estos momentos eso no le importa a nadie".