Laberinto en Ourense: los críticos de DO tienen fuerza para derribar a Jácome con el PP y Cs o con el PSOE y Cs

Un concejal clave exige a su líder y todavía amigo que se aplique la receta de transparencia que pedía cuando estaba en la oposición. Si rompen definitivamente, los cálculos de posibles alianzas son complejos, pero ponen a los críticos de Democracia Ourensana en una situación privilegiada para montar alianzas.

Manuel Álvarez, más conocido en la ciudad como 'Manolo do Forum', es una de las caras más conocidas de Democracia Ourensana. Entre otros factores, por su bonhomía y también por ser uno de los compañeros de Gonzalo Pérez Jácome en aquellas ya míticas, y a veces etílicas tertulias de Auria TV, de las que surgió el partido localista hace años.

Jacome y Manolo do Forum en un antiguo programa de Auria TV

Llegado Jácome a la Alcaldía, Álvarez asumió una de las concejalías del gobierno bipartito que comparten con el PP. Ahora, a pesar de aún considerarse amigo del alcalde, es uno de los concejales que ha roto con él acusándolo de hacer un uso indebido del dinero del partido.

"El espíritu del partido sigue siendo el mismo y lo que no puede ser es que lo que pediamos para otros no lo pidamos para nosotros"

En una entrevista hoy con La Región el concejal reclama a su superior que se aplique la misma receta que enarbolaban desde los platós de televisión, la transparencia. 

El hostelero pide a Jácome que publique los extractos de la cuenta del partido y que cese a los críticos en el caso de demostrarse que mintieron en sus duras acusaciones. "El espíritu del partido sigue siendo el mismo y lo que no puede ser es que lo que pediamos para otros no lo pidamos para nosotros", razona.

Jácome reacciona desde las redes sociales del partido. En ellas da a entender que usa el dinero público lícitamente.

Además, se muestra como víctima de una presunta venganza por parte del periódico local, por limitar el gasto municipal en La Región.

Con anterioridad, había acusado entre líneas a sus cinco compañeros de partido de preparar un 'tamayazo', en referencia a lo tránsfugas que en su día dieron el gobierno de Madrid al PP. También ha hecho referencia a que las tensiones que le pueden apartar de la alcaldía se deben a su intento de sacar adelante un novo plan de urbanismo (PXOM) sin 'pelotazos'.

VARIAS NOVIAS POSIBLES PARA LOS CRÍTICOS DE DO

Lo cierto es que los equilibrios de poder en el Ayuntamiento son muy delicados. Con 5 de los siete concejales de Democracia Ourensana (DO) en contra del alcalde, la coalición de gobierno se queda en teoría solo con el apoyo de 9 ediles. Serían los 7 concejales del PP, que guarda un sospechoso silencio, y dos del bando de Jácome.

Si el PP se suma a los críticos de Democracia Ourensana tendrían 12 votos, suficientes para derribar a Jácome; pero solo si el PSOE se abstiene o consigue sumar a la ecuación a Ciudadanos.  La suma de PP (7), Ciudadanos (2) y críticos de DO (5) da mayoría absoluta con 14 ediles, escenario perfecto para el PP ahora que Jácome ya no puede restarles votos en las elecciones gallegas. 

El más votado, el PSOE, podría aventurarse a una moción de censura con el apoyo de Ciudadanos, sumando 11 concejales. Si lograsen el apoyo de los críticos de Democracia Ourensana, llegarían a los 16 apoyos, también suficientes para derribar al bipartito.  

Sea como fuere,  los críticos de Democracia Ourensana, y en menor medida Ciudadanos, tienen en su mano el futuro de Jácome y del Gobierno de Ourense.  Parece mucho más complicado que el BNG participe en algún pacto, pues implicaría que los nacionalistas aceptasen gobernar con los españolistas de Ciudadanos y los localistas ex-DO.

¿Y LA DIPUTACIÓN?

Pase lo que pase parece que el sillón de José Manuel Baltar en la Diputación no corre peligro.

Una hipotética alianza de críticos (1), más PSOE (8) y Ciudadanos (1) suma 10, 11 en el remoto caso de que lograsen embarcar también al BNG. Son insuficientes, pues el PP tiene 12 diputados, más Armando Ojea de DO que en teoría se mantiene fiel a Jácome. Ni si quiera en el hipotético caso de que Ojea cambiase de bando llegaría para desbancar a Baltar.