El Levante le roba al Celta un fichaje prioritario para Giráldez y obliga a Garcés a rastrear el mercado

Aunque los cantos de sirena fueron muchos y sonaron a lo largo de todo el verano, finalmente Iker Losada ha desoído la llamada del Celta de Vigo y se ha embarcado en una nueva aventura, esta vez en las filas de la UD Levante. El 'vikingo' se va cedido desde el Betis al club azulgrana hasta final de temporada en una operación que frustra las aspiraciones de Claudio Giráldez, que demandó la contratación del canterano celeste para reforzar un ataque que, ahora, tendrá que buscar un nuevo objetivo en el mercado.

FICHAJE FRUSTRADO

La vuelta de Losada parecía cercana pero en los últimos días, con el enfriamiento de las negociaciones, se aceleró la alternativa del Levante, más seductora para el Betis que las opciones que ofrecía el Celta. Finalmente el de Catoira se irá a Valencia en una cesión simple sin opción de compra, una clausula que parecía ser la que distanciaba a celestes y verdiblancos pero que no ha sido un escollo para la salida de Losada rumbo a Orriols.

Será su segunda experiencia fuera de Galicia después de destacar en la cantera del Celta y romperla en el Racing de Ferrol en el regreso de los departamentales a Segunda División. Su buen hacer en la división de plata llamó la atención de un Betis que se lanzó a por su fichaje, pero donde nunca terminó de hacerse un hueco bajo las ordenes de Pellegrini. 

Después de medio año cedido en el Celta, donde fue una pieza de refresco en los esquemas de Giráldez, todo parecía indicar que el jugador salido de A Madroa y los vigueses volverían a unir sus caminos, pero las dificultades del Celta para hacer hueco a Losada -la dirección deportiva trabaja para desprenderse de Aidoo y Cervi- ha sido clave para que su regreso no haya cristalizado.

Esto no significa que no vaya a haber movimientos en A Sede de aquí al día 1 de septiembre. Marco Garcés tiene varios frentes abiertos, pero todo parece estar en stand by, incluso casos que parecían muy cerca de resolverse como el de Denis Suárez. Un portero que compita con Radu, un zaguero, un centrocampista y un hombre de ataque son las piezas que faltan por encajar en el rompecabezas celtiña, donde no tiene hueco Iker Losada.