Rueda, sobre la idea de trasladar el plan de Ence en As Pontes a Lourizán: "Es solo la petición de un sindicato"

El presidente de la Xunta de Galicia ha valorado exausitvamente el significado del pronunciamiento del Tribunal Supremo con respecto a Ence y las consecuencias jurídicas que puede tener para los intereses de la Xunta.

Preguntado por Galiciapress sobre la posibilidad de que el proyecto de la fábrica de fibra y papel tisú de Ence en As Pontes cambie ahora de dirección rumbo a Lourizán una vez asegurada la continuidad de la factoría en la ría, Alfonso Rueda rebajó esa opción a que se trata tan solo de la reclamación de un sindicato.

Con todo, apeló a ser especialmente exigentes con Ence, que ahora tiene que cumplir "los compromisos aparejados a esa prórroga": "Vamos a estar muy vigilantes". 

El fallo del Tribunal Supremo permitiendo la continuidad de Ence en las marismas de Lourizán hasta 2073 ha provocado un carrusel de reacciones que promete seguir sucediéndose en el tiempo. Mientras los trabajadores celebran la decisión del alto tribunal, las asociaciones ecologistas y otras administraciones públicas como el Concello de Pontevedra esperan a conocer el texto de la sentencia para poder emprender las próximas acciones legales en pro de cambiar el dictamen del Supremo. Entre medias, los trabajadores de Ence en Pontevedra buscan volver a la normalidad y recuperar el tiempo perdido en una planta sobre la que hace mucho que no se realizan las inversiones necesarias. 

Es en este punto en el que salió ayer Comisiones Obreras a defender que la factoría pontevedresa precisa más que un lavado de cara y que los trabajadores deberían verse recompensados con los grandes proyectos que tiene en mente la pastera para la comunidad. En esa línea, Aleia Pérez, secretaria xeral de CC.OO. en Galicia, aboga por que la compañía lleve a Lourizán el proyecto de la fábrica de fibra y papel tisú que pretenden construir en As Pontes. 

Para el orgaismo sindical supone la cristalización de “una reivindicación histórica”: completar el ciclo productivo de la firma en Lourizán. Al tiempo, inciden en la urgencia de poner en marcha el plan estratégico con inversiones que permanecía paralizado hasta conocer el juicio del Supremo. 

“ENCE TIENE QUE CUMPLIR SUS COMPROMISOS”

Tras la reunión del Consello de la Xunta, y consultado por Galiciapress, el presidente del Gobierno de Galicia, Alfonso Rueda, se pronunció sobre la sugerencia de Comisiones Obreras, que pilló a muchos con el pie cambiado cuando algunos actores políticos tratan de pasar página cuanto antes en torno a la polémica de Lourizán. 
 

“Ence ahora tiene que cumplir varios compromisos potentes que iban aparejados a la prórroga concedida en su día. Ahora tiene que cumplir en inversiones, en compromisos medioambientales, en el plan social suspendido desde hace tiempo… Ahora todo eso hay que exigirselo”, aclaró Rueda.
 

Rueda recordó que el pronunciamiento del Supremo da validez a la continuidad de Ence en Pontevedra, pero que está sometido a una serie de condiciones. “Lo que ahora se reconoció, para que tenga validez, tiene una serie de condicionantes en torno a unos compromisos de Ence sobre los que estaremos absolutamente vigilantes”, valoró el mandatario. 

“Varios de ellos tienen que ver con inversiones que está realizando la Xunta de Galicia y que Ence tiene que hacer una aportación económica”, apostilló el presidente autonómico, en referencia a las instalaciones de depuración que se están realizando en Lourizán “y sobre las que Ence comprometió una serie de inversiones”.
 

“Y para poder hacer todas esas ampliaciones suspendidas a la espera de la decisión del Supremo necesita de una serie de cumplimientos y requisitos medioambientales estrictos respecto a los cuales vamos a estar muy vigilantes”, avanzó. 

¿PUEDE HABER CAMBIOS EN AS PONTES?

Con respecto a la reclamación hecha desde Comisiones Obreras, Rueda lo rebajó a una simple “petición de un sindicato”. A renglón seguido, supeditó el pronunciamiento de la Xunta a conocer mejor los planes de la compañía, que se haga pública la hoja de ruta de Ence para “cerrar su ciclo fabril”, aspectos que el presidente dice desconocer y sobre los que no se prefiere pronunciar. 

Sin embargo, la posición en Ence con respecto a sus planes industriales en As Pontes no parece que vaya a cambiar pese a su triunfo en el Supremo. En primer lugar, porque el proyecto de As Pontes fue celebrado y anunciado a bombo y platillo por todas las administraciones públicas, que consideraron el anuncio como una de las fórmulas para reanimar a una zona industrilamente deprimida como la comarca del Eume. 

Por otra banda, hay que contar con que la fábrica de papel tisú necesita de una infraestructura y unas características para las que el emplazamiento de Lourizán tal vez no sea el lugar más adecuado, ya que los recursos necesarios o la logística planteada para As Pontes pueden descartar que ese proyecto tenga sitio en la ría de Pontevedra. 
 

LEI DE ORDENACIÓN DO LITORAL

Las consideraciones de Rueda fueron posteriores al anuncio de que el Consello de la Xunta había tratado en profundidad el escenario que ahora se abre para la economía gallega al contar con Ence de nuevo en el tablero. Sin poder cuantificar el impacto económico, una valoración que vendrá “en los próximos días”, el análisis del Consello versó sobre “repercusión desde el punto de vista jurídico” en los planes de la Xunta referidos a la futura Lei de Ordenación do Litoral. 

El texto por el que batallan en San Caetano, presentando un recurso ante el Supremo por el Reglamento General de Costas aprobado por el Gobierno de España el pasado verano, busca dotar de más seguridad jurídica a empresas como Ence, con un largo recorrido en Galicia “creando riqueza y actividad económica vinculada a la costa”. 

En ese primer acercamiento, entienden los servicios jurídicos de la Xunta que el fallo del Supremo “avalará la posición de la Xunta sobre las prórrogas de las concesiones del dominio público marítimo-terrestre”. “Entendemos que este fallo refuerza la tesis de la Xunta. El derecho de las concesiones a ser renovadas queda avalado, por lo que el equilibrio entre la conservación del litoral y mantener actividades claves para la economía gallega es posible”, zanja, lo que supone a su vez un espaldarazo para la Lei de Ordenación do Litoral.