Méndez Romeu: “No estamos ante una escisión, Sánchez debe dejar de liderar el PSOE"
José Luis Méndez Romeu, exconselleiro de Presidencia en la legislatura presidida por Emilio Pérez Touriño y secretario de Estado con José Luis Rodríguez Zapatero, es uno de los firmantes de la carta a Pedro Sánchez pidiendo su dimisión como secretario general del PSOE. Con él son seis exdirigentes socialistas gallegos los que estamparon su rúbrica en el documento enviado al presidente del Gobierno y secretario general socialista. Méndez Romeu, junto a los otros firmantes, pide regeneración, limpieza y controles internos tanto en el partido como en el Gobierno para frenar casos como el de Ábalos, Cerdán y Koldo García. Además, también considera necesario un cambio muy profundo en los socialistas gallegos a los que ve incapaces de superar el actual declive del partido en Galicia
-Usted es uno de los ex-altos cargos que firman una carta al presidente del Gobierno pidiendo su dimisión. ¿Cuál es la evaluación que hace de la actual situación del PSOE primero con el 'Caso Koldo', sus posibles consecuencias y el comportamiento de Pedro Sánchez? ¿Son necesarias unas elecciones anticipadas?
Estamos en un momento de crisis fundamentada en casos de corrupción muy relevantes y que afecta a personas que han tenido responsabilidades muy importantes en el Gobierno y en el seno del PSOE. Junto a esto, lo más preocupante es que todos los datos e indicios que hasta ahora se han recopilado indican que vamos a tener más noticias sobre una trama de corrupción que, lamentablemente, no se va a limitar a una o dos o tres personas. Todo esto es una pérdida de credibilidad frente al electorado además de un problema ético muy importante y, ante esta situación, creo que no se están tomando todas las medidas necesarias. Sí es cierto que en España tenemos un problema muy enquistado con la corrupción política, tanto es así que se repiten los mismos comportamientos de un gobierno a otro desde hace muchos años. Existen informes tanto internacionales del grupo GRECO del Consejo de Europa como académicos publicados en España, que señalan el camino a seguir contra esta situación, sin embargo, lamentablemente, hasta el día de hoy el mundo político español prefiere afrontar los costes de la corrupción que prevenirla. Este problema nos diferencia mucho de otras democracias europeas. Todo esto nos ha puesto en una situación en que, si no se toman medidas, habrá consecuencias electorales para gobiernos locales y autonómicos como ya ha sucedido en otros momentos. Sobre la acción del Gobierno debo decir que está abriendo una brecha dentro del PSOE. Incluso Felipe González, el fundador del socialismo moderno, nada menos que él, daba cuenta de todas estas cuestiones que provocan alarma y abren diferencias muy pronunciadas.
-¿Tanto como para una escisión?
No estamos ante una escisión pero sí ante diferencias de criterios políticos y éticos muy relevantes. Sobre un adelanto electoral diré que el escrito enviado a Pedro Sánchez pide su renuncia a la dirección del PSOE. Hablamos de PSOE y no de Gobierno porque nos parece necesaria una reforma en profundidad para presentarse ante el electorado. El Gobierno, por su parte, depende del Congreso, de los equilibrios parlamentarios y la potestad de disolver las Cortes es exclusiva del presidente del Gobierno. No sabemos cuándo será esto, él dice que en el 2027, sin embargo, en caso de cercanía o celebración simultánea de elecciones autonómicas, municipales y generales, habrá un problema importante. Esta es la situación a día de hoy pero todavía falta mucho.
El mundo político español prefiere afrontar los costes de la corrupción que prevenirla
-¿A qué problema se refiere y cómo es de importante?
Habrá un retroceso electoral para todos. En ocasiones anteriores en que han coincidido procesos electorales con situaciones de escándalo del mismo tipo, todos los alcaldes acabaron sufriendo un retroceso electoral sin tener nada que ver con el problema, ahí están las hemerotecas. Esto es muy injusto y por eso sería necesario separar en el tiempo los procesos electorales.
-También se ha apuntado a cargos del PP envueltos directa o indirectamente en la trama del Caso Koldo.
Al PP le sobra con lo que ya tiene en los tribunales. Ante la corrupción no es cuestión de “y tú más” sino que se deben resolver todos los casos que existen y afrontarlos directamente. pues creo que se ha estado esquivando ese punto. ¿Si la actual trama tiene otras derivaciones? Es posible. Este tipo de tramas se extienden por todo el territorio con empresas implicadas y unos personajes con conexiones comerciales y económicos entre ellos. Por tanto, nada descartable en el momento actual.
-Sin embargo, Pedro Sánchez no parece tener intenciones de dimitir, es más, transmite la sensación de no ser una persona beneficiada en los tejemanejes del Caso Koldo.
¡Es que solo faltaría que Pedro Sánchez tuviese una implicación directa! Lo que se está cuestionando es la capacidad de control para prevenir situaciones como esta tanto dentro de los partidos como del Gobierno. El problema no es una persona corrupta, el problema es la existencia de un sistema que permite periódicamente la aparición de tramas corruptas. Ante esto, todavía no he oído nada nuevo, al revés, se habla de conductas personales, gente que se desvía de la norma. En los países con más controles son muy estrictos y hay una separación más clara entre administración y política. No como en España, donde hay una gran cantidad de puestos que se cubren por confianza política.
Sobre un adelanto electoral diré que el escrito enviado a Pedro Sánchez pide su renuncia a la dirección del PSOE
-¿Cómo es posible que estas personas, Koldo, Ábalos y Cerdán puedan haber convencido a Sánchez de presentarse a las primarias, o qué pudieron haber visto en él para convercerlo?
La pregunta es de ida y vuelta: ¿qué pudo haber visto Sánchez en ellos? Es posible que estas personas le ofrecieran crear una estructura en muy poco tiempo, justo en un momento en que Sánchez era un dirigente muy aislado. El ser conocedor o no de lo que vino después está en el fondo de las relaciones personales. Así pues, creo que en el origen estaba la necesidad de uno y la oferta de los otros para hacerle la labor de apoyo.
-¿Cree que Adriana Lastra y Zaida Cantera han sido verdaderamente víctimas de este entramado?
Solo conozco sus declaraciones en los medios. Los partidos no son organizaciones benéficas, las confrontaciones son muy vivas incluso internamente, esto significa que puede haber cambios, gente descontenta y resentida. Dicho esto, parece ser que los modos implantados por este trío (Ábalos, Cerdán, Koldo) eran expeditivos. Frente a eso hay varios caminos como protestar, organizarse o callar y resignarse, pero no conozco en detalle lo que ha sucedido con esas personas.
-¿Apostaría por la vuelta de Adriana Lastra, por ejemplo?
Los dirigentes del futuro deberán ser elegidos en un congreso, algo que pedimos en la carta. Ahí será cuando se conozca a las personas que lideren la próxima etapa.
-¿Qué pasos habría que dar para separar política de administración?
Un ejemplo muy radical fue el gobierno del presidente Touriño en la Xunta. Cuando llegamos al gobierno autonómico una de las primeras leyes que queríamos crear y dependía de mi departamento, Consellería de Presidencia, era una reforma de la Lei de Función Pública. En ese momento había 800 puestos de altos funcionarios que se cubrían a dedo, nuestra propuesta era cubrir como puestos de libre designación las subdirecciones y secretarías de altos cargos. El objetivo es que estos puesto tuviese estabilidad con independencia del cambio de gobierno. El PP, al volver a la Xunta en 2009, tumbó la ley con el silencio cómplice de todas las organizaciones sindicales.
El problema no es una persona corrupta, el problema es la existencia de un sistema que permite periódicamente la aparición de tramas corruptas
-¿Es posible que Sánchez se esté apartando de todo el caso para que le perjudique lo menos posible?
La permanencia del presidente del Gobierno depende de los acuerdos parlamentarios. El Ejecutivo está en una minoría muy notable, por tanto depende de que los aliados lo apoyen en cada momento. A los aliados esta situación les viene muy bien porque cuanto más débil esté el Gobierno mayores prebendas pueden obtener. A la vista está todo lo obtenido por los partidos nacionalistas menos el BNG. Esa es la garantía para Sánchez, cuanto más débil esté el Gobierno más lo apoyarán los socios parlamentarios por interés propio. ¿Si está el presidente más o menos implicado? Eso lo dirán los tribunales. El caso es que existen en este momento media docena de causas judiciales con una evolución imprevisible y que implican a numerosas personas. Todo esto es la punta del iceberg según las informaciones que nos van llegando y todo lo que hay debajo acabará saliendo.
-¿Cuál sería, pues, el camino de recuperación y regeneración que se propone para el futuro del PSOE?
En el documento enviado a Sánchez se habla de recuperar la democracia interna y los controles internos. Históricamente el PSOE tenía un órgano interno que fiscalizaba la acción de las personas con mayor peso en el partido. Esto suponía que se expusieran a las opiniones de un número importante de dirigentes. Desde la implantación del sistema de primarias está “ungido” por el voto directo y escapa al control interno. Cualquier cambio debe pasar por recuperar los equilibrios internos para que quien tenga un mayor nivel de poder pueda oír y conocer las apreciaciones de su organización. Hay que introducir cambios legales para que no se repitan temas como este y plantear además un rearme ético de la organización. No es cierto que el voto popular faculte para hacer cualquier cosa, en todos los sistemas democráticos es necesario que existan contrapesos en las instituciones para que nadie se desvíe del buen camino. Esto es lo que enseñan las democracias estables. Por tanto, en mi opinión, Sánchez debería dimitir como secretario general del PSOE.
-Durante la época de González como secretario general y presidente del Gobierno no había primarias, aún así surgieron casos como Roldán y otras tramas.
Pues claro, porque la corrupción es siempre la misma, es siempre igual y siempre viene por los mismos cauces que normalmente son tres. La contratación de obras públicas, como sucedió con el Caso Roldán. Siguen las cuestiones de urbanismo que después de la crisis de 2008 quedaron muy tocadas. El último cauce son las contrataciones de personal. Después de la Gürtel las CCAA crearon organismos de transparencia y control pero cuando pasó la euforia muchos de esos organismos fueron vaciados de competencias y rara vez vemos que un caso de corrupción sea denunciado desde estas estructuras internas. Hay mucho por mejorar.
El Ejecutivo está en una minoría muy notable, por tanto depende de que los aliados lo apoyen en cada momento
-Desde su posición como militante, ¿ve a Salvador Illa sustituyendo a Sánchez?
Salvador Illa está haciendo una labor encomiable dentro de un escenario muy difícil como es Cataluña y donde no tiene mayoría. Aún así, no veo posible que Illa abandone la Generalitat porque Cataluña, ahora mismo, es el principal feudo electoral del socialismo. No es un escenario viable.
Pasar de veinticinco escaños a nueve es un fenómeno que todavía no tiene explicación. Dejar todo el espacio de la izquierda al BNG tampoco se ha explicado.
-¿Después de los resultados de las últimas autonómicas gallegas cree que Besteiro podrá relanzar al PSdeG en la próxima cita con las urnas?
No. Veamos, acaban de cumplirse veinte años del gobierno Touriño, curiosamente el PSdeG no ha querido hacer ningún acto de conmemoración, no sé si es por una cierta vergüenza o si la comparación podría resultar escandalosa. Pasar de veinticinco escaños a nueve es un fenómeno que todavía no tiene explicación. Dejar todo el espacio de la izquierda al BNG tampoco se ha explicado. Esto no va a cambiar en breve, el BNG está ahora mismo en una posición cómoda como alternativa, por eso no creo que la actual dirección socialista gallega esté en condiciones de recuperar terreno en las próximas autonómicas.
-¿Y si observamos la respuesta del PSdeG a lo que está sucediendo, qué conclusión saca?
No han dicho nada, no he oído su voz.
-¿En caso de que Sánchez no renuncie, que les queda a los militantes como usted que piden justamente lo contrario?
Nos queda votar. Yo no estoy en la política activa por tanto tengo la responsabilidad de cualquier elector. En el caso extremo de que convoque generales en dos años, dominados por escándalos de corrupción, va a ser un problema. Estaremos ante una situación igual a la última etapa del PP con Rajoy, donde la crónica judicial se impone a la vida política. Es el riesgo que tenemos ahora.
-En relación a lo que ha dicho del PP, ¿cree que todos estos temas, incluyendo la investigación a la mujer del presidente del Gobierno, es una “venganza” de los 'populares' después de la moción de censura?
No, no lo creo. Sí es cierto que estos asuntos son muy golosos mediáticamente y para evitar esto hay cuestiones conocidas desde los clásicos, ¿qué decían los romanos sobre la mujer del césar?: “Mi esposa no sólo debe ser honrada, sino también parecerlo”. Dar un paso en falso es dar carnaza en términos mediáticos y políticos, si esto sucede se vuelve incontrolable. Por eso insisto en que sobre estas cuestiones lo más importante es la prevención.
-¿Se ha planteado dejar la militancia por descontento o desilusión?
¿Por qué he de dejar la militancia? Puedo estar descontento o disconforme con algunas personas. ¿Acaso los católicos se vuelven ateos cuando no les gusta un Papa? Protestan en privado. Sin embargo, esto es algo más serio y debe cambiar. El PSOE es uno de los pilares de la democracia española, por tanto, aunque ahora tenga un rumbo errático, el electorado, en algún momento, demandará una representación con la que se sienta cómodo.
Acaban de cumplirse veinte años del gobierno Touriño, curiosamente el PSdeG no ha querido hacer ningún acto de conmemoración, no sé si es por una cierta vergüenza o si la comparación podría resultar escandalosa
-En redes sociales se ha visto que los firmantes del documento enviado a Sánchez son personas que buscan retomar las riendas del PSOE.
Eso es una tontería, solo hay que ver la lista de nombres para ver que ninguno está en la política activa. Esto es mucho más sencillo, los futuros dirigentes son los que están en la vida política activa. A los militantes como yo nos queda la capacidad de analizar y expresar nuestra opinión.
-¿Es posible derrotar al PP en Galicia?
En abstracto sí, pero si me pregunta de inmediato, no. El problema es que la oposición en Galicia es muy débil y sobre todo, mientras no se haga algo, que fue el mérito del presidente Touriño, esto es, ensanchar el espacio de centro por parte del PSOE a costa del PP, mientras esto no se consiga y exista un intercambio de cromos entre PSdeG y BNG, el PP siempre tendrá la mayoría absoluta. Eso no lo va a hacer el BNG y el PSdeG en los últimos años parece haber renunciado a hacerlo.
-Aún así, el BNG podría aprovechar ese espacio para sacar votos.
Podría, pero no está haciendo lo que debe. Observemos ese espacio de centro que ahora ocupa el PP, observemos la clase media urbana en Galicia que es donde se debería estar produciendo ya ese cambio, el BNG no consigue entrar en ese espacio. Mientras no se entre en ese espacio de centro no habrá mayoría para derrotar al PP. Este es el drama que tenemos ahora.
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