"Se busca campanero": A Estrada acoge el I Congreso para recuperar y poner en valor un oficio histórico

Más allá de cuando suenan indefectiblemente para marcar las horas: ¿sabría usted distinguir a qué tocan las campanas? ¿Sabría identificar si tocan a difunto o a boda? ¿Saben si el que ha fallecido es un hombre o una mujer por su sonido? El de campanero es un oficio antiquísimo y en extinción, que sin embargo era, en otros tiempo, de gran importancia por toda la información que era capaz de transmitir con el simple sonar de las campanas, un sonido que viajaba por el aire y llegaba mucho más lejos y antes que cualquier diario. Ahora la tecnología ha superado por completo a este oficio, que sin embargo algunos se empeña en recuperar.

En A Estrada celebrarán este sábado en la iglesia de San Xurxo de Cereixo acogerá el sábado el I Congreso Gallego de Toque Manual de Campanas. Será un evento abierto al público y en el que se pondrá en valor esta profesión en desuso pero reconocida por la Unesco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. 

En la cita se tratarán todos los aspectos en torno a este trabajo: desde la técnica para tocar las campanas hasta las distintas armonías y su significado. Antropólogos, algunos de los 600 campaneros manuales que quedan en Galicia o historiadores se encontrarán en el municipio pontevedrés, donde también habrá hueco para talleres de catalogación de campanas o para su restauración. 

"Cuando había un incendio, cuando moría alguien, cuando nacía alguien...eran las campanas las que daban la noticia. Puede haber unos 50 toques diferentes de campana", recuerda Carlos Fernández, presidente de la Asociación pola Defensa do Patromonio Galego, entidad que organiza las jornadas junto con el gobierno estradense. Fernández incide en que no se tocaban igual las campanas por hombres y mujeres, como tampoco por ricos y pobres.