El Ministerio pedirá al SERGAS los datos del cribado de varios cánceres tras la polémica andaluza

En lo referido al cribado del cáncer de mama en Galicia, normalmente las mujeres deben recibir una carta a las dos semanas, aproximadamente, del cribado para informarles que no hay anomalías. De lo contrario, el SERGAS las suele llamar por teléfono. Un procedimiento que Madrid quiere revisar tras la polémica por los atrasos en Andalucía, algo que puede traer mucha polémica política.


|

La ministra de Sanidad, Mónica García, ofrece declaraciones a la prensa tras la reunión extraordinaria del pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), a 8 de octubre de 2025, en Madrid (España).
La ministra de Sanidad, Mónica García, ofrece declaraciones a la prensa tras la reunión extraordinaria del pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), a 8 de octubre de 2025, en Madrid (España).

La ministra de Sanidad, Mónica García, pone énfasis vigilancia de los programas de detección precoz del cáncer en España al anunciar este miércoles que el Ministerio ha solicitado a todas las comunidades autónomas los datos de todos los programas de cribado activos —cáncer de mama, colon y cérvix—. El objetivo, según enfatizó la titular de Sanidad, es hacer un “seguimiento exhaustivo” de su desarrollo y “reforzar la vigilancia” de estos servicios esenciales del Sistema Nacional de Salud (SNS).

 

Durante la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), García subrayó la importancia de disponer de información precisa y homogénea sobre los diferentes programas autonómicos para poder detectar fallos, desigualdades o deficiencias estructurales en su funcionamiento. La decisión se enmarca en el contexto de los retrasos detectados en el programa de detección precoz del cáncer de mama en Andalucía, que se ha convertido en el punto de partida del estudio “pormenorizado” que prepara el Ministerio.

 

Un problema estructural en Andalucía

En la rueda de prensa posterior al Consejo, Mónica García fue tajante al referirse a la situación andaluza. Rechazó de manera rotunda las explicaciones ofrecidas por la Junta de Andalucía, que achacaba los fallos a un problema informático puntual, y aseguró que se trata de un “fallo estructural” que responde a una “falta de control” y de “seguimiento”. 

 

 

Declaró que no se trata de un hecho aislado, sino de una consecuencia directa de años de desinversión y de una “falta de confianza del Gobierno de Moreno Bonilla en la sanidad pública”.

 

La ministra sostuvo que en un ámbito tan sensible como la prevención del cáncer “no puede haber fallos estructurales que arriesguen la vida de las mujeres”. Destacó que estos programas son “el radar del sistema”, una herramienta esencial para detectar de manera precoz el cáncer y aumentar las tasas de supervivencia. A su juicio, lo ocurrido en Andalucía es “la punta del iceberg de un modelo sanitario” impulsado, según señaló, por el Partido Popular, que estaría deteriorando progresivamente la sanidad pública “a través de la privatización y la falta de compromiso con los servicios esenciales”.

 

Llamamiento a la responsabilidad de la Junta

Mónica García criticó duramente la gestión política del presidente andaluz, Juanma Moreno, a quien acusó de “echar balones fuera” en lugar de asumir responsabilidades. Afirmó que el líder del ejecutivo autonómico “culpa al Gobierno central, a los radiólogos y a todos menos a su propia administración”, cuando lo que se espera en una crisis sanitaria de estas características es “dar la cara y asumir responsabilidades”.

 

La ministra insistió en que el Ministerio de Sanidad no permitirá que este tipo de fallos se repitan ni permanezcan sin respuesta. Explicó que las mujeres andaluzas —y, por extensión, las ciudadanas del resto de España— tienen el derecho a saber qué ha fallado, por qué ha fallado y cómo se va a reparar. Por ello, subrayó que el Ministerio ejercerá su papel como “líder y coordinador” cuando una comunidad autónoma no garantice adecuadamente los servicios esenciales de salud, tal y como exige el marco del Sistema Nacional de Salud.

 

Supervisión nacional de los cribados

La solicitud oficial del Ministerio de Sanidad a todas las comunidades incluirá datos sobre las principales variables que determinan la eficacia de los cribados: tasas de participación, tasas de respuesta y tasas de mortalidad, además de otros indicadores que mide la Ponencia de Cribados del CISNS. Con esta información, el Ministerio establecerá un marco comparativo que permita detectar desigualdades entre comunidades, reforzar aquellas que presentan déficits y consolidar las buenas prácticas en las que se están logrando resultados óptimos.

 

García defendió que “reforzar los cribados es salvar vidas” y avanzó que el Ministerio trabajará “de la mano de las comunidades autónomas” para garantizar que cada programa de detección precoz funcione con calidad, cobertura y humanidad. Aseguró que el SNS debe ofrecer un nivel homogéneo de prestaciones en todo el territorio, en cumplimiento de los principios de equidad y cohesión que rigen el sistema sanitario público.

 

El contexto de la polémica

La situación de Andalucía se ha convertido en un eje central del debate sanitario de las últimas semanas. Los fallos detectados en el programa de detección del cáncer de mama habrían provocado retrasos de hasta varios años en las citaciones de mujeres dentro del rango de edad recomendado para realizar las pruebas de mamografía preventiva. Este hecho ha generado inquietud entre las asociaciones de pacientes y colectivos sanitarios, que reclaman medidas urgentes para restablecer la normalidad y evaluar el impacto real que estos retrasos puedan haber tenido sobre la salud de las afectadas.

 

Desde la Junta de Andalucía, fuentes del Gobierno regional han restado gravedad al problema, indicando que se trata de una incidencia técnica temporal que “ya está siendo corregida” y que no ha afectado a la integridad del programa. Han acusado al Ministerio de “politizar una cuestión sanitaria” con fines partidistas.

Sin embargo, en el Ministerio de Sanidad consideran que la respuesta andaluza es insuficiente. “No basta con identificar un error técnico —explicó García—, sino con garantizar que los sistemas de control funcionan, que la supervisión es constante y que los errores no se convierten en una amenaza para la salud pública”.

 

El SERGAS te llama: así funciona la red gallega que salva vidas con una mamografía a tiempo

 Cada dos años, miles de mujeres gallegas reciben una carta que puede ser vital. Es la invitación del Servizo Galego de Saúde (SERGAS) para participar en el Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama. Este sistema, consolidado y gratuito, es una pieza clave en la lucha contra el tumor más frecuente en mujeres, buscando la enfermedad antes de que dé la cara. Analizamos su engranaje, desde la llamada inicial hasta el diagnóstico.

 

1. ¿A QUIÉN SE DIRIGE? LA POBLACIÓN DIANA

 

El programa está enfocado en el grupo de mayor riesgo.

  • Mujeres por edad: El foco principal son todas las mujeres con edades comprendidas entre los 50 y los 69 años. Se considera que en esta franja de edad la mamografía es más eficaz y la incidencia del tumor es mayor.
  • Mujeres con riesgo elevado: Existe un protocolo específico para mujeres que, sin haber alcanzado los 50 años, presentan un riesgo familiar o genético alto. Estas pacientes son valoradas en Unidades de Consejo Genético y pueden iniciar un seguimiento personalizado antes de la edad estándar del cribado poblacional.

 

2. EL PROCESO PASO A PASO: DE LA CARTA A LA IMAGEN

 

El funcionamiento es sistemático y está diseñado para llegar a toda la población objetivo de forma activa.

  • La Invitación: El SERGAS inicia el proceso. No tienes que pedirlo. A través de un cruce de datos del censo y la tarjeta sanitaria, se envía una carta certificada al domicilio de la mujer. En esta carta se especifica una fecha, hora y lugar para la realización de la prueba.
  • Flexibilidad: Si la cita no es conveniente, se puede cambiar fácilmente llamando al teléfono que se proporciona en la misma carta. La adherencia es clave, por lo que se dan todas las facilidades posibles.
  • La Mamografía: La prueba de cribado es la mamografía bilateral. Se realizan dos proyecciones de cada mama (cráneo-caudal y oblicua-media-lateral) para obtener una imagen lo más completa posible del tejido mamario. La prueba dura apenas unos minutos y, aunque puede resultar molesta por la compresión necesaria, no es dolorosa. Se realiza en las Unidades de Exploración Radiológica específicas del programa.

 

3. ¿Y DESPUÉS DE LA PRUEBA? LOS RESULTADOS

 

Una vez realizada la mamografía, se abre un proceso de análisis riguroso para garantizar la fiabilidad.

  • Doble Lectura: Para minimizar errores, cada mamografía es interpretada por dos radiólogos distintos de forma independiente. Si hay discrepancias en su valoración, un tercer radiólogo experto evalúa la prueba para llegar a un consenso.
  • La Comunicación:
    • Resultado Normal: Si no se detecta ninguna anomalía, la mujer recibe una carta en su domicilio en un plazo aproximado de dos semanas informándole de que el resultado es normal. Se le indica que será invitada de nuevo pasados dos años.
    • Resultado Anómalo: Si se detecta alguna imagen sospechosa o que requiere un estudio más profundo, el proceso cambia. El personal del programa se pone en contacto telefónico con la mujer para darle una nueva cita en una Unidad de Diagnóstico y Tratamiento. Es importante subrayar que un resultado anómalo no significa tener cáncer. La gran mayoría de las veces son hallazgos benignos (quistes, calcificaciones sin importancia, etc.).

 

4. CUANDO HAY QUE SEGUIR INVESTIGANDO: LA UNIDAD DE DIAGNÓSTICO

 

Si la mamografía de cribado arroja dudas, se activa un segundo nivel de estudio para confirmar o descartar la patología.

  • Pruebas Complementarias: En esta nueva cita, se realizan estudios adicionales según el tipo de imagen detectada. Las pruebas más comunes incluyen:
  • Proyecciones mamográficas adicionales para ampliar una zona concreta.
  • Ecografía mamaria, que ayuda a diferenciar lesiones quísticas (líquidas) de lesiones sólidas.
  • Biopsia: Si una lesión sólida es sospechosa, se procede a tomar una pequeña muestra de tejido (biopsia con aguja gruesa o PAAF) para analizarla en el laboratorio de anatomía patológica. Este es el único método que confirma con certeza la presencia de células cancerosas.
  • Diagnóstico Final y Tratamiento: Si finalmente se confirma un diagnóstico de cáncer, la paciente es derivada de inmediato a los servicios especializados de ginecología, oncología y cirugía para iniciar el tratamiento correspondiente. Gracias a esta detección precoz, el pronóstico suele ser muy favorable, con tratamientos menos agresivos y mayores tasas de curación.

 

Última hora

Sin comentarios

Escribe tu comentario




He leído y acepto la política de privacidad

No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes. Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Última hora
Cabeceralomasleido 1
Cabecerarecomendados 1

Galiciapress
Plaza de Quintana, 3 15704 Santiago de Compostela
Tlf (34)678803735

redaccion@galiciapress.es o direccion@galiciapress.es
RESERVADOS TODOS LOS DERECHOS. EDITADO POR POMBA PRESS,S.L.
Aviso legal - Política de Cookies - Política de Privacidad - Configuración de cookies - Consejo editorial - Publicidad
Powered by Bigpress
CLABE