La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denuncia que las mediciones del gas en el edificio de Tui suponen un claro riesgo para la salud de los trabajadores.
El sistema, compatible incluso con grandes edificios, promete ser asequible y se controlará mediante una aplicación móvil.
Algo más de la mitad de los pacientes que se someten a estas pruebas se podrán beneficiar de este sistema, unos 23.000 al año.