La política sanitaria en Galicia

Un hombre falleció este verano en el PAC de A Estrada sin asistencia médica

Las noticias este verano del 2018 con respeto al sector sanitario no pueden ser más desesperanzadoras. La falta de personal sanitario en muchos lugares de Galicia hace que las consultas, las pruebas diagnósticas, las intervenciones quirúrgicas u os servicios de urgencias se vean retrasadas até o infinito.

La falta de previsión de los “gestores sanitarios” es evidente. Con nombres a apellidos: el Presidente de la Xunta de Galicia (el Sr. Feijoo) y el conselleiro de sanidad. Tuvieron encima de la mesa todas las alarmas para definir una política sanitaria que no precarice el empleo, que mire por el futuro de la sanidad en Galicia, que haga caso a todas las advertencias que se le fueron dando desde las organizaciones sociales (la Plataforma SOS Sanidade Pública de Galicia y la Asociación Galega para a Defensa da Sanidade Pública, entre muchas otras), junto con los sindicatos e incluso los Colegios de Médicos, las Asociaciones de enfermos y de familiares de enfermos, las asociaciones de vecinos, etc. A todos estos avisos de emergencia, el PP y el Sr. Feijoo hicieron oídos sordos.

¿Cuál puede ser la causa de no tener una línea sanitaria definida por parte del PP? Sería kafkiano pensar que el que pretende el PP es deteriorar el Sistema Sanitario Público Gallego, para luego de su deterioro, con el aumento de la comorbilidad y mortalidad: privatizarlo. Pero esto es muy perverso. Como unos servidores públicos pueden pretender de forma premeditada que un servicio público tan importante como la sanidad (el bien más preciado que tenemos que es la salud), pueda prestarse mal de forma intencionada.

Pero a los hechos tenemos que remitirnos (y son empecinados). Si el sistema, como dice el Conselleiro de Sanidade, pretende tener personal sustituto para los puestos sanitarios...y además, se queja de que no los tiene: ¿de quién será la culpa? Por supuesto del contratador. Si el personal tiene que trabajar más horas de las que le van a pagar, si le hacen contratos de lunes a viernes aunque continue el trabajo durante meses, si les pagas la hora de trabajo ínfimamente y no relacionado con el esfuerzo de 6 años de carrera y 4 de especialización: el personal marcha del sistema (más bien “échalo o propio sistema”).

Desde las diferentes organizaciones hablamos siempre de prever las circunstancias, antes de que nos coja el toro (vacunación de la gripe, la propia epidemia de la gripe, que aumente la demanda de asistencia en los servicios de urgencias en la época de la epidemia, el cierre de camas en verano que hace aumentar las listas de espera...) Todo es previsible. Cualquier buen gestor lo tendrá en cuenta y podrá poner remedio antes de que sea tarde. En la administración sanitaria funciona al revés: primero viene la demanda, luego el deterioro del servicio y después las disculpas de mal pagador (nunca mejor dicho) de los responsables directos del destrozo.

Lo importante de la gestión es hacer antes las previsiones de lo que va a suceder y ponerle remedio antes de que sea tarde. ¿Hace esto la Consellería de Sanidad? Por supuesto que no, y se muestran muy ufanos al decir que ya pidieron más plazas de MIR, que ya han hablado con el Ministerio de Sanidad para tener más perosal, que esto sucede en todas las CCAA (vaya consuelo para lo cual padece la falta de atención), que no tenemos suficientes sustitutos para trabajar en condiciones precarias cuando faltan los titulares y el sistema los llama, etc. Menudas disculpas. ¿¿En que manos estamos? ?

Personalmente, solicito la dimisión del Conselleiro de Sanidade y de los responsables de la gestión de la Consellaría de Sanidad. Solicito que finalicen las políticas de recorte y desmantelamiento de la Sanidad Pública Gallega, especialmente de la Atención Primaria. Exijo la eliminación de la tasa de reposición y su fórmula de cómputo, que sólo permite convocar las vacantes producidas en el año anterior, impidiendo así convocar las vacantes generadas entre lo 2010 y 2016. Pido también un Plano de Estabilidad que permita convertir en interinas todas las plazas estructurales cubiertas con contratos eventuales. La administración tiene que reforzar los dispositivos de atención a las Urgencias en los PAC. Debemos “consensuar”un Plan Urgente de Reposición de Recursos Presupuestarios y de Personal. Volver a poner en marcha el Plan de Mejora de la Atención Primaria. 

Como vemos, se pueden hacer muchas cosas, y si no se hacen, puede que sea por una estrategia oculta que provoque lo deterioro del Sistema Sanitario Público Gallego de manera interesada. Con la política actual, evidentemente la favorecida será la sanidad privada y los perjudicados la ciudadanía de Galicia. 

El malestar social y profesional con esta situación es muy grande y abocará la nuevas movilizaciones si no se corrige pronto esta política sanitaria de la Xunta de Galicia.