El vertedero que después de multas y clausuras sigue funcionando

‘STOP vertedoiro Santiago’ atiende a Galicia Press cuando la Fiscalía de Medio Ambiente acaba abrir diligencias de investigación penal por un posible delito medioambiental en Miramontes. Los afectados se quejan de que siguen malos olores y sigue entrando basura, mientras la Xunta mira para otro lado.

Una pasada manifestación de los afectados

El vertedero de Miramontes se encuentra finalmente bajo la lupa de la Fiscalía de Medio Ambiente después de que está decidiese abrir diligencias de investigación penal por un posible delito medioambiental. Esta decisión llega después de las reiteradas denuncias de la Plataforma de afectados ‘STOP vertedoiro Santiago’, que lucha por la eliminación del espacio en el que se sitúa el vertedero y las empresas que lo gestionan y su descontaminación. A pesar del anuncio de desde la plataforma todavía no lanzan las campanas al vuelo, advirtiendo de que ahora es momento de “esperar las investigaciones del Ministerio Fiscal en aras al pleno esclarecimiento de los hechos denunciados”.

“Hasta entonces, seguiremos intentando darle visibilidad a nuestro problema denunciando los malos olores que soportan día a día los vecinos y vecinas, vigilando la situación de los ríos, solicitando que se hagan controles de las aguas, manteniendo reuniones con la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Cambio Climáticoy con la Dirección Xeral de Saúde Pública… En definitiva, buscando soluciones a una situación totalmente injusta y nociva”, advierten desde la asociación, manteniendo la hoja de ruta que han seguido hasta la fecha y que poco a poco ha ido dando buenos resultados de los que se sienten “muy satisfechos”. Con todo, todavía están lejos de lograr el cierre del Complejo Ambiental de Miramontes y su descontaminación. “No tenemos otra alternativa que la de seguir vigilantes”, admiten desde la plataforma.

Basura en el vertedero en una imagen facilitada por los vecinos

Del mismo modo, desde ‘STOP vertedoiro Santiago’ recalcan la estrecha colaboración que mantienen con asociaciones ecologistas como Adega, Verdegaia, Ecologistas en Acción o Greenpeace. Así, afirman que estas asociaciones que lo que haces es denunciar “la falta de inspecciones rigurosas y adecuadas por parte de la Administración competente, especialmente la Xunta de Galicia”.

DEFICIENCIAS GRAVES

En lo referido a las condiciones del complejo de Miramontes, la asociación destaca que se realizan tres actividades: “la de extracción de áridos y dos actividades de gestión de residuos”. “Por un lado, el vertedero de residuos industriales no peligrosos de la cantera (gestionado por una UTE) aprovecha un hueco de cuarzo ya explotado y por otro lado la empresa Tecnosolos Galaicos SL se encarga de la recuperación de los espacios degradados de la cantera, elaborando suelos artificiales (los denominados tecnosoles) a partir de residuos para crear un sustrato sobre el que plantar vegetación”, comentan desde la plataforma, denunciando que el principal problema es que “ninguna de las dos actividades de gestión de residuos se está realizando de acuerdo a las autorizaciones ambientales que poseen, lo que está generando un importante problema medioambiental en la zona, además de graves molestias a los vecinos”, como malos olores y otras molestias constantes.

Fueron estas denuncias de vecinos las que provocaron que se realizasen inspecciones en el vertedero, que posteriormente confirmaron los incumplimientos y las deficiencias que presentaba la instalación, lo que desembocó a su vez en multas cercanas a los 200.000 euros a la empresa Tecnosolos Galaicos SL y la retirada del “tecnosol”, que dicen no cumple los requisitos para ser considerado tecnosol.

Imagen del vertedero en un vídeo de Lentes Diverxentes

La insistencia de los vecinos al denunciar los malos olores y las "malas prácticas" que venían observando desde hace tiempo, consiguió que en el año 2017 se realizasen varias inspecciones de estas actividades (vertedero y planta de elaboración de tecnosoles). Estas inspecciones dicen  confirmaron todos los incumplimientos observados por los vecinos y pusieron de manifiesto graves deficiencias en la gestión tanto del vertedero como de la planta de elaboración de tecnosoles. “La planta se encuentra cerrada cautelarmente para la entrada de residuos desde enero de 2018 (medida cautelar tomada por la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Cambio Climático) y la medida se mantiene mientras no se repare el daño. Suponemos que la empresa recurrirá las sanciones” señalan desde la plataforma ecologista, que lamenta que las sanciones no repercutan de la misma manera sobre el vertedero de residuos industriales no peligrosos “a pesar de los multiples incumplimientos detectados”, como el hecho de que “aparentemente” el vertedero ha pasado a ser un vertedero de residuos domésticos u residuos orgánicos, cuando la instalación no está ideada para albergar ese tipo de residuos y cuyo porcentaje, que no debería rebasar nunca el 10%, se sitúa ya en torno al 30% de materia orgánica.

“La descomposición de la materia orgánica mezclada con otro tipo de residuos industriales está causando olores nauseabundos que merman considerablemente las condiciones de vida de la población cercana a la instalación, además de que la inhalación de cierto tipo de gases puede causar problemas de salud, tanto a los trabajadores como a los vecinos”, denuncian desde la plataforma sobre esta situación insostenible, ya que el vertedero está situado “a menos de 500 metros de las viviendas” pero sigue “funcionando con normalidad pese a las deficiencias detectadas”, como las advertencias relacionadas con los depósitos de almacenamiento de lixiviado que se encuentran en mal estado, a pesar de que la Xunta es conocedora de esta situación.

Por otro lado, la plataforma asegura que los camiones que acceden al complejo “lo hacen ilegalmente por la única vía posible, un camino rural de titularidad municipal limitado a 5,5 t. La única empresa que tiene permiso excepcional de paso es la que gestiona la cantera”, comentan.

Aunque las deficiencias son evidentes, la asociación “desconoce” si se han tomado medidas para mejorar las condiciones del vertedero. “La impresión que tenemos es la de una inacción continuada ya que, pese a los informes de la propia Xunta de Galicia, siguen entrando camiones de obra que chorrean porque transportan basura”, critican los miembros de la plataforma.

UN RIESGO MEDIOAMBIENTAL

“En el caso del vertedero, la gestión de los gases es fundamental para la seguridad del mismo. Una mala gestión puede provocar grietas, explosiones, derrumbes, incendios (ya ocurrieron al menos 3 en la historia del vertedero)”, dicen desde la plataforma sobre los posibles riesgos medioambientales que puede provocar la actividad del vertedero, advirtiendo a su vez que puede afectar a las aguas subterráneas y que la actividad de la cantera, próxima al vertedero, supone “un peligro evidente”.

Del mismo modo la plataforma sostiene que la empresa de tecnosoles, sobre la que está enfocado uno de los informes presentados a la fiscalía, ha contaminado el agua de la zona. “En enero de este año se produjo un vertido que llegó hasta las aguas del Gatofero. Existe también una posible afección a fuentes cercanas a la cantera”, asegura la plataforma, que lamenta que todo esto ha provocado que “el agua de una de las fuentes que abastece a la aldea de Miramontes ya no es potable”.

Sin embargo, no es el único incumplimiento de Tecnosolos Galaicos SL que, denuncia la plataforma, incumple diversas leyes medioambientales. “La empresa realizó prácticas como la deposición de casi 4.000 t de residuos procedentes del drenaje de la ría de Noia directamente sobre el terreno; la acumulación de material procedente de residuos en el extremo de la cantera próximo a la planta de elaboración, formando una pared artificial de varios metros de altura; o la canalización hacia el exterior de la cantera, mediante una zanja excavada directamente en la tierra, de los lixiviados de los residuos y supuestos tecnosoles acumulados” relatan desde la asociación, prácticas que afectaron a terrenos vecinales.

“La sensación es de dejadez total. Pasa el tiempo sin que se tomen medidas contundentes, y quién sabe las consecuencias que esto puede traer en el futuro”, sentencian amargamente desde la plataforma.