El tándem Jácomoe-Baltar bloquea el cambio en el sistema de financiación de la Diputación ourensana

La sesión extraordinaria del Pleno de la Diputación de Ourense ha rechazado la moción presentada de manera conjunta por PSOE y BNG con el fin de cambiar el sistema de financiamiento del ente provincial. Los votos en contra de PP y Democracia Ourensana, ambos gobiernan en coalición, y la abstención de Ciudadanos ha imposibilitado un acuerdo.

El portavoz socialista en la Diputación, Rafael Rodríguez Villarino, ha fundamentado la petición en una única meta: "Atender a las necesidades de todos los ayuntamientos ourensanos en base a unos mismos derechos", mediante un plan único de financiación.

Además, los socialistas han defendido la idoneidad de la celebración de esta sesión extraordinaria por ser "el momento y el lugar previo a que se lleve al Pleno la aprobación de los presupuestos", prevista para el próximo día 27 de septiembre.

En la misma línea han ido las declaraciones del portavoz del BNG en la Diputación, Bernardo Varela, que ha sostenido que la moción que firma su grupo tiene como objetivo que "se cumplan las leyes de competencia de asistencia económica a todos los Ayuntamientos de la provincia".

"No podemos seguir con la discrecionalidad actual y para ello planteamos una propuesta de plan único que beneficiará a todos", ha continuado Bernardo Varela. El diputado socialista ha entendido "difícil" no votar a favor de dicha moción.

DESACUERDO EN LAS FORMAS Y LOS TIEMPOS

No obstante, el resto de grupos de la corporación no han compartido su visión. La diputada de Ciudadanos, Montserrat Lama, ha comenzado su turno de palabra diciendo estar "totalmente de acuerdo" en el fondo de la cuestión, pero "no en las formas ni en los tiempos".

La diputada de Ciudadanos han sostenido estas afirmaciones en la consideración de que "está fuera de tiempo" dicha propuesta, cuando todavía no son conocedores de los presupuestos para el próximo 2020.

Lama ha calificado de "falta de rigor" la "crítica" a aquello que todavía no existe y ha añadido que, el próximo 27 de septiembre, si se diera el caso de que los presupuestos no fueran "justos para todos" será la "primera voz crítica".

Del mismo modo, la diputada de Ciudadanos ha cargado contra "la palabrería medieval y el lenguaje impropio" que ha dicho ver en el escrito de la moción y en las declaraciones de los grupos promotores a este respecto.

Más críticos todavía han sido los grupos de gobierno, de la coalición de PP y DO, que han calificado de "discurso simplificado y limitado" las formas con las que PSOE y BNG solicitan el cambio a un modelo único. Además, han argumentado que la modificación del modelo de financiación supondría "un gran perjuicio para algunos ayuntamientos".

Concretamente, el portavoz del PP en la Diputación, Plácido Álvarez, ha indicado que "no es un planteamiento unitario" y que "ni siquiera responde a la decisión de la mayoría de grupos". "Lo que ustedes no dicen es que ni todos los socialistas, ni todos los nacionalistas, ni el resto de formaciones están de acuerdo con su planteamiento", ha añadido.

Para argumentar que el plan único no beneficiaría a todos los ayuntamientos, el portavoz popular ha aludido a una frase recurrente de su ahora socio de gobierno, Gonzalo Pérez Jácome: "Lo que es medible no es opinable".

Por su parte, el portavoz de Democracia Ourensana, Miguel Caride, ha dicho que el escrito de la moción es "papel mojado" porque "los alcaldes y personas a las que las afecta directamente esta moción no son conocedores de las condiciones que esto conllevaría" y, ante esto, ha pedido a los peticionarios que "hagan las cosas bien e informen primero a los suyos".