​El Supremo juzgará a los ‘19 de Meirás’ por su protesta y Rego cree que deberían ser los Franco “los que se sentasen ante el tribunal”

La Fundación Francisco Franco y la familia Franco sentaron en el banquillo de los acusados a los 19 participantes en una protesta “simbólica y pacífica” según la definen los acusados. Acusados entre los que figura Néstor Rego, miembro del Congreso de los Diputados por el BNG y que goza de la condición de aforado.

Rego atiende a Galiciapress para compartir sus impresiones por este traslado de la causa, que afrontan “con determinación y orgullo por una acción que entendemos de justicia y absolutamente necesaria para restituir la dignidad a todas las personas represaliadas por el franquismo y especialmente aquellas que fueron víctimas del atropello para que el dictador se hiciese ilegítimamente con la posesión del Pazo de Meirás”.

Protesta de los '19 de Meirás'

El auto del Juzgado de Instrucción nº2 de Betanzos es claro: la causa es indivisible, así como sus acusaciones, ya que la denuncia de la Fundación y los Franco no distingue entre denunciados, atribuyendo la realización de los presuntos delitos imputados en la denuncia a todas las personas participantes de forma conjunta. Así, el juzgado acordó la “inhibición de la causa” a favor del Tribunal Supremo.

Desde la plataforma denuncian que la denuncia “intenta criminalizar el ejercicio al derecho democrático a la libertad de expresión, un hecho que consideramos en sí grave e inadmisible”. “Los herederos de un dictador que con su régimen trajo a nuestro país el terror de más de 40 años de una cruel y asesina dictadura, están ahora pidiendo hasta 13 años de prisión para quien defiende la democracia y la memoria histórica”, critican los denunciados.

“Estamos orgullosas y orgullosos del que hicimos, y, aun considerando que este proceso judicial es uno sin sentido, estamos dispuestas y dispuestos a enfrentarlo” expresan desde la plataforma.

“EL MUNDO AL REVÉS”

El papel de Néstor Rego, portavoz de la plataforma, en esta causa es fundamental para que esta pase a las salas del Supremo. A pesar de la noticia, Rego admite para este medio que el traslado de la causa al Tribunal Supremo no es el aspecto relevante del caso, ya que a su entender “que sea juzgado en un sitio u otro no tiene demasiada importancia”. “Lo que creemos relevante es el hecho de que personas demócratas seamos denunciadas por la familia del dictador Franco y acusadas de cuatro delitos que podrían suponer hasta 13 años de prisión para cada uno de nosotros por reclamar algo que es de justicia: que aquello que fue robado al pueblo gallego sea devuelto”, sostiene el diputado nacionalista.

En esa línea, lamenta que esta causa sea propia del “mundo al revés” y que debería ser la familia Franco “la que se sentase en los tribunales y no aquellos que ejercen un derecho fundamental como la libertad de expresión y la libertad de manifestación”. Rego recalca que en todo caso la acción fue “simbólica, pacífica y realizada en un día en el que el Pazo de Meirás tenía que estar abierto al público”.

No obstante, y a pesar de las consecuencias penales que la protesta pueda acarrear, el diputado del BNG sigue manteniéndose firme en su reivindicación. “Con independencia de que sea un despropósito (la causa), todas las personas que participamos estamos muy orgullosas de una acción que contribuyó de manera decisiva a que la lucha que durante mucho tiempo muchas personas para la devolución del patrimonio robado por los Franco alcanzase una nueva dimensión, moviese cosas en el ámbito político como consecuencia de la repercusión mediatica que tuvo, provocase unanimidad en el Parlamento de Galicia, que se elaborasen sendos informes jurídicos por la cámara gallega y por la Diputación de A Coruña, y que hoy el propio Gobierno central tenga presentada una reclamación en la demanda judicial por medio de Patrimonio del Estado para recuperar el Pazo de Meirás”.

“Afrontaremos la causa con determinación y orgullo por una acción que entendemos de justicia y absolutamente necesaria para restituir la dignidad a todas las personas represaliadas por el franquismo y especialmente aquellas que fueron víctimas del atropello para que el dictador se hiciese ilegítimamente con la posesión del Pazo de Meirás”.

UNA LUCHA DE MUCHOS AÑOS

Néstor Rego llegó a Madrid con una agenda en la que la devolución del patrimonio expoliado por la familia franco estaba marcado en rojo como uno de sus objetivos prioritarios. El diputado nacionalista es una de las voces que más presión ha ejercido estos años para que el Estado tome parte de esta batalla para que el Pazo de Meirás pase de nuevo a ser propiedad pública. Pero como Meirás, la Casa Cornide o las estatuas de Isaac y Abraham son otros de los elementos de disputa entre las administraciones públicas y la familia Franco desde hace años. 

En octubre del pasado año, Galiciapress conversó con Néstor Rego con motivo de las elecciones del 10 de noviembre a las que se postulaba con el objetivo de hacerse con un escaño por A Coruña. 

En esa ocasión ya mostró su decepción porque hubiese “tres causas abiertas por los Franco contra militantes del BNG: una en el caso del Pazo de Meirás, otra contra un compañero militante como es Carlos Babío que escribió un libro donde se demuestra, entre otras cosas, cómo se produjo esa apropiación; y otra contra nueve personas por una acción en la Casa Cornide”.

Protesta del BNG ante la Casa Cornide: Néstor Rego, Ana Pontón y Francisco Jorquera

En el caso de estos últimos iban a ser juzgados el 5 de noviembre en los juzgados de A Coruña, pero la familia del dictador logró aplazar el juicio al pedir penas más altas para los acusados. Una reclamación que el propio Rego tachó en su momento de “despropósito”. “Vamos a mantener con firmeza la recuperación de todo el patrimonio robado por el dictador Franco y vamos a plantar cara”, zanjó.