El Corte Inglés y cuatro sindicatos esconden las cifras que justificarían deshacerse de 3.000 empleados

Los sindicatos aceptan la "confidencialidad" de los "datos sensibles" que figuran en la memoria del plan de reorganización

El Corte Inglés excluye de lo que llama plan voluntario de bajas a los mayores de 50 años. En términos generales, estos son los empleados que tendrían derecho a una mayor indeminización en caso de despido, pues suelen ser los que llevan más tiempo en la empresa.  La empresa alega que no los incluye en el plan porque son los que, de irse a la calle, tendrían más difícil encontrar a otros trabajadores. 

Las negociaciones del plan de empezaron hoy. Por ahora CCOO, FASGA, Fetico y UGT  hacen frente común en la Comisión de Negociación Sindical. Estos son los cuatro sindicatos representados en la negociación, de la que quedan fuera fuerzas con menos representación a nivel estatal, como el gallego CIG y los vascos LAB y ELA.

Según una nota pactada por las cuatro centrales, tampoco entrarán en el plan de bajas incentivadas los colectivos de empleados eventuales y contratos de relevo, ni los asalariados de "días sueltos".

Los sindicatos interpretan la información de la empresa no como "un plan de rejuvenecimiento, ni de desvinculación", sino "un proceso de reducción de plantilla y reorganización de la empresa".   La reorganización de la empresa a los nuevos mercados digitales es precisamente uno de los motivos enarbolados por la compañía para justificar los despidos.

Otro motivo, quizás de más calibre, es la enorme deuda que arrastra el grupo, cuya deuda está aun paso del bono basura. Los sindicatos dicen que ECI les entregó hoy un informe  técnico y económico de las causas que justificarían los recortes. 

Sin embargo, los sindicatos parecen que no están dispuestos a hacer públicas esas cifras, alegando confidencialidad de "datos sensibles".  Ante un medida "de enorme calado e importancia para la empresa" a los trabajadores no les queda otra, por lo tanto, que hacer un ejercicio de confianza en los representantes de las grandes centrales. 

NEOLENGUA SINDICAL

La empresa pretende deshacerse de casi el 5% de su plantilla. La única vía que tiene para evitar un ERE, que abriría las puertas accediese al citado informe, es lograr que la práctica total de los 3.000 operarios en el disparadero pida la baja voluntaria, en teoría a cambio de indemnizaciones superiores a los mínimos legislados para los ERE. En su comunicado, las cuatro centrales jamás usan el término despido, hablan de "finalización de vida laboral en el Corte Inglés".

De esos 3.00o empleados, 2.500 corresponderían a centros comerciales y 500 a las oficinas de servicios centrales. ECI, venderá, cerrará o reformulará tiendas e inmuebles propios, entre ellos la sede central en el barrio de Goya en Madrid.