Ni Luis Díaz ni Woltemade, el gran fichaje del Bayern de Múnich es gallego y llega desde Ourense

Mucho se está hablando del mercado de fichajes del Bayern de Múnich. Los bávaros vienen de firmar a Luis Díaz por 75 millones de euros, un fichaje récord para el conjunto alemán, que logra un refuerzo de muchos quilátes para pelear por la Bundesliga y tratar de dar la campanada en la Champions League. Al tiempo, los de Kompany pesiguen la contratación de un ariete que compita con Harry Kane. El elegido es Woltemade, un futbolista que puede provocar que rompan de nuevo la caja fuerte para acometer otro fichaje de altura. Sin embargo, el verdadero fichaje no viene de Liverpool ni de Stuttgart, sino de Ourense y no a golpe de chequera, sino desde abajo, desde la cantera del cuadro muniqués. 

¿LA HORA DE SU CONSAGRACIÓN?

Se trata de Javi Fernández, un muchacho de 18 años -cumplirá 19 en noviembre- sobre el que la academia del Bayern tiene depositadas muchas esperanzas. No es un recién llegado, ya que desembarcó en Alemania hace ya más de dos años tras pasar por las canteras de Celta y Atlético de Madrid.

El ourensano maravilló al Bayern en su primer año, después de firmar por el club en enero de 2023, cuando ya era un habitual en el radar de las inferiores de la Selección Española, con la que jugó la Eurocopa sub-17 compartiendo once al lado de un tal Lamine Yamal, con el que guarda una estrecha relación. Marc Guiu, Héctor Fort, Pau Cubarsí, Jon Martín o Izan Merino también asomaban en aquella selección.

Con un futuro prometedor, Javi pronto se hizo con los mandos del centro del campo en el Bayern juvenil, donde dirigió el equipo en su primer curso completo hasta los cuartos de final de la Youth League, cayendo contra el Olympiakos, a la postre campeón del torneo en el que firmó tres goles y dos asistencias, completando la totalidad de los minutos. Ese año debutó con la sub-18 y con el Bayern II, pero cuando se había hecho un fijo en el filial las lesiones comenzaron a truncar su despegue.

El año pasado los problemas musculares lo dejaron prácticamente todo el año en el dique seco, justo cuando estaba llamado a entrar en los planes del primer equipo, con el que debutó el año pasado en pretemporada. El tobillo primero y el menisco después le impidieron jugar más de cinco partidos el pasado curso. Ahora, a la espera de que el Bayern inicie la pretemporada -el 2 de agosto juega el primer amistoso contra el Lyon-, Javi Fernández espera la alternativa para demostrar que puede volver al nivel previo a sus lesiones. Este puede ser el año de la consagración del auriense en un equipo necesitado de talento tras la lesión de Musiala, que abre la puerta a más afectivos en el centro del cámpo bávaro.