Cómo está evolucionando la economía de Galicia en 2025 en comparación con 2024

Galicia ha entrado en 2025 con impulso. La economía regional está creciendo, la producción industrial ha aumentado y el desempleo ha descendido en comparación con el año pasado. A primera vista, parecen buenas noticias. Sin embargo, al igual que muchas regiones de Europa, Galicia también se enfrenta a retos a largo plazo que no pueden resolverse únicamente con cifras.

¿Qué ha cambiado desde 2024?

En 2024, Galicia creció alrededor de un 2,4 %, un poco por debajo de la media española. Ahora ha recuperado la paridad nacional. El desempleo ha bajado un 4,4 % en el segundo trimestre del año. Es una relación de causa y efecto. La industria se expande y el empleo le sigue.
 

Este momento de crecimiento es real. Sin embargo, hay un elefante en la habitación: ¿se trata de un crecimiento estructural o solo estamos aprovechando el impulso temporal de los fondos de recuperación europeos y la normalización tras la pandemia?
 

La previsión de crecimiento del 2,2-2,5 % para todo 2025 parece razonable. Sin embargo, sin medidas de apoyo a los trabajadores, las familias y el desarrollo sostenible, es posible que los beneficios a corto plazo no duren.

La columna vertebral industrial

En primer lugar, los hechos. El PIBcreció un 2,8 %  de Galicia interanual en el primer trimestre de 2025. No es una casualidad. Es el resultado del trabajo real de industrias reales. El sector industrial creció más del 10 %, con contribuciones significativas de la construcción y la agricultura.
 

Las exportaciones representan ahora el 42,8 % del PIB de Galicia. Eso no solo es bueno, es mejor que la mayoría de España, donde la media se sitúa más cerca del 29 %. Pero hay que recordar que la calidad es más importante que la cantidad. Las principales fuentes de ingresos de Galicia son la automoción, la industria textil y la alimentación. Stellantis, en Vigo, sigue siendo el motor principal, con un 29 % de la producción exportada. Inditex y otras empresas textiles aportan otro 24 %.

Se trata de sectores con una producción tangible: fábricas, logística, mano de obra cualificada. No son vagos «ecosistemas de innovación» o «ciudades inteligentes» que existen principalmente en las pizarras.

Exportaciones y producción

Hay que reconocer lo que hay que reconocer. Las exportaciones de Galicia funcionan. La producción industrial creció un 1,9 % en los primeros ocho meses del ciclo fiscal, superando la media nacional. Es impresionante en un país donde el crecimiento industrial suele ser lento.
 

A diferencia de los centros tecnológicos especulativos que persiguen unicornios, la economía de Galicia sigue basándose en fabricar cosas que la gente puede tocar. Coches. Ropa. Pescado. Es anticuado, pero funciona.

El iceberg demográfico

Ahora bien, aquí está el verdadero problema. Mientras Galicia se dedica a contar las exportaciones, su mano de obra se está evaporando. La región tiene una de las poblaciones más envejecidas de Europa. Más del 26,6 % tiene más de 65 años. Por cada 100 personas que se jubilan, solo 23 nuevos trabajadores se incorporan al mercado laboral.

No se trata de hipótesis. Solo en 2024, quedaron sin cubrir 12 000 puestos de trabajo, principalmente en el sector tecnológico y en oficios cualificados. No es viable gestionar una economía del siglo XXI con una pirámide de edad del siglo XIX. A menos que se importe talento, se producirá una lenta y dolorosa contracción.

Peor aún, 21 000 personas en edad de trabajar han abandonado la región en los últimos seis años. Eso es erosión estructural. Una persona racional se pregunta si el crecimiento del PIB será sostenible una vez que desaparezca el capital humano.

Dónde debe mirar el dinero inteligente

El crecimiento constante y la resiliencia industrial de Galicia han comenzado a atraer la atención de los inversores minoristas y los observadores del mercado. Desde las acciones locales hasta Forex Trading, las señales económicas suelen servir como indicadores más amplios de la estabilidad regional. Esto es algo que los operadores de divisas y las plataformas financieras tienen rápidamente en cuenta en sus modelos.

¿Y si estás en el gobierno? Deja de obsesionarte con el turismo y los folletos sobre la «cultura de las start-ups». Necesitas reformas prácticas, como políticas de cuidado infantil, desgravaciones fiscales para la contratación de jóvenes e inversión en formación profesional. De lo contrario, la falta de mano de obra cualificada se convertirá en un agujero negro.
 

No se puede ignorar la gravedad

Los resultados de Galicia a principios de 2025 son mejores que los del año pasado. Eso es algo que hay que celebrar. La economía está creciendo. Las exportaciones van bien. Se están creando puestos de trabajo. Sin embargo, el crecimiento por sí solo no garantiza un futuro mejor si se deja atrás a sectores clave de la población o si la región no puede sostener a sus comunidades envejecidas y a su futura mano de obra. La oportunidad existe. Y los gallegos han demostrado una y otra vez que están dispuestos a trabajar. ¿El siguiente paso? Un liderazgo que a la altura de esa energía con una visión a largo plazo.