SERGAS promete más vigilantes de seguridad tras las agresiones en A Coruña y Muxía

La gerencia del área sanitaria de A Coruña y Cee ha trasladado a la Comisión de Centro una batería de medidas de aplicación "inmediata" encaminadas "a prevenir las agresiones y las situaciones de violencia en el entorno sanitario".

Según informa, en la reunión, convocada la semana pasada y celebrada esta misma mañana entre la dirección del área sanitaria, la Comisión de Centro y los jefes de Servicio de Urgencias, Salud Mental y Orden Interno y Seguridad, se pusieron en conocimiento diez medidas.

"En la misma, también se concretó la búsqueda de solución a las necesidades de dotación de recursos en salud mental", explica en un comunicado. En las medidas se plantea incrementar los efectivos de seguridad y revisar los protocolos existentes, "siempre asesorados por los expertos en la materia y buscando también referencias en otros hospitales".

También la revisión y actualización, por parte de los profesionales especialistas en la materia, "habida cuenta las sugerencias que se hicieron en la propia reunión, de los protocolos clínico-asistenciales a pacientes potencialmente agresivos".

Además, "seguir trabajando en el proceso de análisis causa-raíz", señala sobre la última agresión, "y la puesta a disposición de apoyo psicológico a través del servicio de salud mental del área, no solo para las personas que sufrieran agresiones verbales o físicas, sino aquellas que tengan temor o les surjan dudas sobre cualquier tema relacionado con este asunto, y el correspondiente asesoramiento legal relacionado con las agresiones o la violencia en general en el entorno sanitario".

Otras medidas son la extensión del botón del pánico en todas las áreas del hospital en las que sea posible y llevar a cabo esta misma semana una reunión con la Fiscalía gallega "en la búsqueda de colaboración y medidas que ayuden a paliar este problema".

A ellos suman la puesta en funcionamiento de una nueva unidad de ingreso hospitalaria de salud mental "con la que se incrementan el número de camas en un 40%, así como el personal facultativo y sanitario preciso para atender a estos pacientes".

Otras son aumento de la derivación a otras áreas sanitarias, de los enfermos que precisen ingreso, mientras no se disponga camas suficientes para atender a estos pacientes y previa reserva de camas, a centros concertados dedicados la atención a estos enfermos dentro de nuestra comunidad autónoma.

Asimismo, "iniciar las actividades formativas ya propuestas y solicitar la relación de actividades detectadas a los responsables de los servicios y supervisiones de enfermaría y desde la dirección dirigir y supervisar que lleven a cabo además de organizarlas y financiarlas".