Salud mental: El SERGAS no contrata a 17 de los psicólogos prometidos pese al alza de suicidios y listas de espera

El Consello de Contas de Galicia haanalizado  la gestión del Plan de Saúde Mental del Sergas ejecutado entre 2021 y 2023. Según su auditoría publicada hoy, el gasto real fue de 24,5 millones de euros, frente a los 29,1 millones previstos inicialmente, lo que supone una desviación del 16% respecto a la memoria económica original. A pesar de contar con presupuesto asignado, no se llegó a ejecutar toda la inversión.

Este desfase se explica en parte porque los presupuestos anuales de la Xunta ya nacían con una dotación inferior a la planificada: 28,8 millones frente a los 29,1 iniciales. Incluso tras modificaciones de crédito, que dejaron el total en 28,9 millones, el gasto efectivo quedó muy por debajo. La falta de ejecución afectó a proyectos estratégicos y prioritarios del plan pospandemia.

El informe destaca que esta situación generó retrasos en contrataciones y la imposibilidad de implementar algunas medidas previstas, lo que tuvo un impacto directo en la capacidad asistencial del sistema público gallego.

Contratación de personal por debajo de lo previsto

Uno de los puntos más críticos del documento es el incumplimiento en la incorporación de profesionales de salud mental. De los 241 que se preveía contratar entre 2020 y 2023, solo se incorporaron 224. El año más señalado es 2020, cuando solo se incorporaron dos psicólogos clínicos, frente a los 55 profesionales previstos.

Aunque en años posteriores hubo incrementos en las contrataciones, el objetivo global no se cumplió. Esto agrava la ya existente escasez de psiquiatras en Galicia, cuya ratio en 2019 era de 8,7 por cada 100.000 habitantes, por debajo del mínimo recomendado por la Organización Mundial de la Salud, que establece entre 13 y 15.

Además de ser insuficientes, los recursos humanos se repartieron de manera desigual en el territorio gallego, lo que ha alimentado las inequidades en el acceso a los servicios.

Listas de espera y desigualdad entre áreas sanitarias

El impacto de la covid-19 en la salud mental es evidente. Las consultas en Psiquiatría crecieron un 13% en 2021 y un 3% en 2022 respecto a 2019. A la vez, el número de personas en lista de espera pasó de 8.411 en 2019 a 10.431 en 2023, y los días de espera aumentaron de 43 a más de 73.

Este aumento no fue uniforme. Mientras que en áreas como Ourense-Verín-O Barco, Lugo-A Mariña-Monforte y Vigo los tiempos de espera se duplicaron o triplicaron, en otras como A Coruña-Cee o Pontevedra-O Salnés descendieron. Solo tres de las siete áreas sanitarias consiguieron reducir las listas de espera, incumpliendo uno de los principales objetivos del plan.

El informe alerta sobre esta falta de equidad territorial, que implica que no toda la población gallega tiene el mismo acceso a los recursos de salud mental públicos. En términos generales, las provincias de Ourense y Lugo están peor.

Aumento del consumo de psicofármacos entre jóvenes

Otro dato preocupante que refleja el informe es el crecimiento del 13% en la prescripción de ansiolíticos y antidepresivos entre 2019 y 2023. El aumento es especialmente llamativo en menores de 19 años, donde el consumo se disparó un 52% tras la pandemia.  Galicia, junto con Asturias, tiene una prevalencia más alta en enfermedades mental, situándose por encima del 16% (en concreto, en el 21,9%), especialmente en las mujeres.

Visitas a los psicólogos: el porcentaje de población gallega que visitó al psicólogo, psicoterapeuta o psiquiatra en los últimos seis meses antes de la elaboración de dicho informe es del 6,06%. Galicia junto con Melilla, Asturias, Valencia y Castilla-La Mancha se sitúa entre las comunidades con un mayor valor asociado a este indicador

A esto se suma un incremento sostenido en la cifra de suicidios, que subió un 4% en 2020, un 15% en 2021 y un 12% en 2022, según los datos del Instituto Galego de Estatística. La evolución pone de relieve la urgencia de reforzar la red de atención y prevención en salud mental.

Para el Consello de Contas, estos datos evidencian una necesidad no cubierta por parte de los servicios públicos, lo que puede estar favoreciendo la medicalización como respuesta principal ante el malestar psicológico.

Recomendaciones para el nuevo plan de 2025

El Consello de Contas propone una serie de medidas de cara al próximo plan de salud mental, previsto para 2025. Entre ellas, reclama al Sergas que garantice recursos económicos suficientes y que estos estén disponibles a tiempo, así como una mayor transparencia en la gestión mediante informes periódicos de evaluación.

En materia de personal, sugiere reforzar la contratación en las áreas más deficitarias y extender la presencia de Psicología Clínica a la Atención Primaria. También insiste en que se eliminen desigualdades en el acceso, tanto por zonas como por colectivos específicos.

Para ello, recomienda diseñar programas con indicadores medibles que permitan ajustar las estrategias en función de los resultados, asegurando una atención de calidad adaptada a las necesidades emergentes.