Las víctimas de un abogado ourensano acusado de estafa daban los pagos en mano porque "confiaban totalmente" en él

La Audiencia Provincial de Ourense ha acogido este lunes el juicio contra un abogado acusado de estafar a unas clientas a las que tramitaba una herencia y que, según han dicho en la vista, "confiaban totalmente" en el letrado, por lo que le dieron distintos pagos en mano.

La vista contra este abogado se había suspendido ya en cuatro ocasiones, alegando problemas de salud o cambio de abogado. Sin embargo, finalmente, hoy se ha podido celebrar el juicio.

Los hechos se remontan al periodo entre 2017 y 2019, cuando, según acusa el Ministerio Público, el abogado estafó casi 28.000 euros a una madre y su hija en distintos pagos por supuestos trámites que no realizó.

"Teníamos un contrato verbal y habíamos pactado las comisiones", ha defendido el abogado, que solo ha querido contestar a las preguntas de su letrado y ha hecho hincapié en que estuvo ingresado "ocho meses después" de lo sucedido y tiene "algunas lagunas".

Por su parte, la hija, que ejerce la acusación particular, ha relatado que conocía al abogado previamente y tenían buena relación. Ha negado que pactasen precios "ni por verbal ni por escrito", si no que ha dicho "confiaba totalmente" en los pagos que le pedía.

"Me enteré que algo pasaba cuando faltaba por pagar la procuradora de oficio. Fue mi marido el que se dio cuenta", ha contado, trasladando que un amigo los acompañó hasta otro abogado a contrastar datos de los pagos y, en ese momento, se puso en contacto con la procuradora, "que le dijo que no había cobrado".

"No tengo recibos de las costas porque se los pedí por activa y por pasiva. Yo quería saber cuanto gastaba y mi madre quería verlos, pero me decía 'somos como de la familia'", ha manifestado.

La mujer ha dicho que llegó a entregarle al abogado para hacer frente a esas costas "un sobre pequeño dentro de un sobre grande envuelto en celo", que le dijo que dejase en una sala al fondo del Colegio de Abogados. "Le pregunté si era necesario que le escribiese algo por fuera y me dijo que no. Lo metía directamente en el maletín, unas veces me decía que lo llevaba al banco y otras veces que se lo llevaba a la procuradora". En uno de sus sobres entregó la mitad de las costas, alrededor de 9.000 euros.

La herencia que supuestamente tramitaba era la legítima que le pertenecía a una media hermana por el fallecimiento del padre. La hija que ejerce la acusación particular se encargaba de la gestión con el abogado porque la madre de ambas ya tenía 89 años y la había puesto de titular en la cuenta bancaria. Una vez que se terminó el dinero de la cartilla de la madre, continuó con los pagos usando su propia cuenta bancaria.

Así pues, la madre ha declarado que primero ella hizo frente a los pagos, pero "tenía un patrimonio muy pequeño, poco más de 3.000 euros en la cartilla" y, cuando se acabó, vendió un piso en un barrio ourensano para que su hija "no tuviese que tirar de ahorros". "Lo vendí por una vergüenza, por 38.000 euros", ha relatado entre lágrimas. diciendo que aún así tuvieron que emplear el dinero de la hija.

"Acabó con el piso, con mis ahorros, con los de mi hija, con mi salud, con la de ella, con la de todos. Nos acabó con todo", ha concluido.

Entre las cantidades que recoge el escrito fiscal se reflejan 2.190 euros como provisión defondos, 4.850 euros por aumento de cuantía en el procedimiento ordinario por tema de herencia, 1.850 euros "por honorarios y aranceles" por señalamiento de vista oral, 7.569 euros "por aranceles y retención fiscal", 2.625 euros "por gastos fiscales", 2.850 euros "por acción reconvencional" y 5.985 euros "por acción en procedimiento".

Así las cosas, el Ministerio Fiscal considera que es un delito estafa probado en el que hubo "ánimo de lucro", por lo que pide tres años y medio de prisión. También la acusación particular considera acreditado el delito, mientras que la defensa entiende que "no hay engaño previo y por tanto no hay estafa, como mucho deslealtad profesional". "Haría su trabajo mejor o peor, pero lo hizo y debía cobrar", ha indicado el letrado en su informe de conclusiones, en el que ha pedido la libre absolución de su cliente.

En la Audiencia de Ourense también se había fijado para esta misma jornada otra causa que tiende pendiente también por estafa el mismo abogado, en este caso por quedarse con pagos de un cliente al que dijo que interpondría un recurso decasación por una petición de incapacidad, trámites que nunca realizó.

Este juicio, sin embargo, se ha visto aplazado porque el acusado ha renunciado a la letrada que lo representaba, según él, hace ya dos meses, aunque en la audiencia no había constancia, por lo que no había nombrado un abogado de oficio. La próxima citación aún no tiene fecha.