Muere un joven motorista de Marín tras un brutal accidente que lo despidió a la ría de Pontevedra

El suceso se suma a una preocupante cadena de incidentes fatales que tienen como protagonistas a los conductores de dos ruedas en la comunidad, elevando la alarma sobre la seguridad vial en Galicia. Las autoridades judiciales han tomado el control del caso, mientras que la Guardia Civil de Tráfico ha iniciado las pesquisas para desentrañar las circunstancias exactas que rodearon este dramático suceso, que de momento apunta a un accidente con un único vehículo implicado, sin intervención de terceros.

La alerta inicial llegó a los servicios de emergencia del 112 Galicia poco antes de las 5:00 horas, tras la llamada de un conductor que circulaba por la PO-11, en el término municipal de Pontevedra, en dirección a Marín. Este testigo se percató de la presencia de una motocicleta gravemente dañada que se encontraba siniestrada entre la acera y el carril derecho de la autopista. Sin embargo, lo más inquietante era la ausencia del piloto, lo que de inmediato hizo sospechar de la gravedad del percance.

Esta primera notificación activó un amplio dispositivo de emergencia y movilizó a diversos cuerpos de seguridad y rescate. Aunque la moto estaba en la vía, el conductor no aparecía, lo que centró las primeras labores de búsqueda en el entorno inmediato de la carretera. La rápida intervención y la localización de la moto en un punto tan cercano al litoral hicieron temer, de forma inmediata, que el joven hubiera caído al mar.

Tras la llamada al 112, el centro de coordinación de emergencias puso en marcha un protocolo que implicó a Urxencias Sanitarias de Galicia-061 y a la Policía Local de Pontevedra. Sin embargo, dado el sombrío panorama, se hizo imprescindible la actuación de medios especializados en rescate acuático. En consecuencia, se solicitó la colaboración de Salvamento Marítimo, dada la posibilidad de que el conductor se encontrase en la ría.

Finalmente, fueron los Bomberos de Pontevedra quienes, con su equipo de rescate acuático, lograron recuperar el cadáver del joven motorista del agua, confirmando el peor de los desenlaces. El cuerpo fue hallado a una distancia aproximada de 30 metros de la orilla, confirmando que la víctima había sido despedida con violencia de la calzada tras el impacto. Aunque Salvamento Marítimo se había movilizado, fueron los efectivos del parque municipal de bomberos quienes concluyeron las labores de recuperación del cuerpo sin vida.

En estos momentos, la Guardia Civil de Tráfico se encuentra al frente de las diligencias para determinar la circunstancias exactas del siniestro en la PO-11. Aunque los indicios iniciales, según las fuentes consultadas, apuntan a un terrible accidente en el que no intervinieron más vehículos ni personas, la autoridad judicial de Pontevedra se ha hecho cargo del caso y de la orden de levantamiento del cadáver para la realización de la autopsia.

La investigación se centrará en esclarecer si pudo haber un exceso de velocidad, una distracción o cualquier otro factor que provocase la pérdida de control en ese punto de la autovía, que discurre paralela a la ría y que, por su ubicación, convierte cualquier salida de vía en una amenaza potencialmente mortal. 

Informes de la Fundación Línea Directa revelaron que más de 200 motoristas perdieron la vida en las carreteras de la comunidad en la última década, con un incremento en los accidentes mortales con motos implicadas del 74% a nivel estatal. Además, se estima que más de 8.400 resultaron heridos, una cifra que ilustra la fragilidad de los motoristas ante cualquier percance.