Trabajadores de centros cívicos reclaman al Ayuntamiento de Santiago que abra expediente a Ferrovial
Martiño Noriega pide que "no se confunda el enemigo" y demanda "voluntad de acuerdo a ambas partes"
Medio centenar de trabajadores y usuarios de los centros cívicos se han manifestado frente al Pazo de Raxoi para reclamar al Ayuntamiento de Santiago de Compostela que abra expediente a Ferrovial --adjudicataria de estos servicios-- y realice una auditoría externa sobre el cumplimiento de sus obligaciones.
El delegado de prevención del comité de empresa y presidente del comité de salud, Óscar Otero Mahía, ha explicado que los trabajadores se manifiestan como consecuencia de "la ruptura de la mesa de negociaciones con Ferrovial en la que se estaba discutiendo un nuevo convenio colectivo para la regularización de la situación de los trabajadores".
Los trabajadores han protestado también "por el trato recibido por parte de la empresa", con "presiones a los trabajadores y desorganización del servicio".
Otero ha declarado que solicitan "unas condiciones dignas" y "promociones internas". En este sentido, ha recordado que "muchos trabajadores" llevan "años en este trabajo" y que la empresa "sigue contratando a gente nueva con salarios más bajos".
Aunque la cuestión salarial no es la única de las reivindicaciones, Otero ha insistido en que los trabajadores antiguos tenían un salario "más alto, por encima del convenio" y que a la empresa "le interesa contratar a gente nueva y no hacer promociones".
REUNIÓN CON EL AYUNTAMIENTO
Antes de la manifestación, representantes de los centros cívicos se han reunido con la concejala de Políticas Sociais, Concha Fernández, y con el jefe de gabinete de alcaldía.
Otero ha dicho que ha habido "buenas palabras", pero que "no es suficiente", porque "son necesarios hechos". "Llevamos varias reuniones con ellos, pero sin grandes avances. No han abierto un expediente para ver qué estaba pasando", ha lamentado.
Preguntado por la solicitud de apertura de expediente a Ferrovial, Otero ha dicho que quieren "una auditoría externa para ver si se cumple el servicio o no". "Están incumpliendo los pliegos, por eso exigimos un control", ha añadido.
Sobre este respecto ha detallado que "deja la puerta abierta al despido". Ha recordado que "no respetaron el derecho a subrogación de seis trabajadores" y que "muchas de las horas que se están pagando no se prestan de manera efectiva".
NEGOCIACIONES CON FERROVIAL
Este martes, 20 de noviembre, a las 10,30 horas, está prevista una reunión entre representantes de los centros cívicos y de Ferrovial. Otero no se ha mostrado optimista con respecto a este encuentro, en el que se decidirá si se retoman las negociaciones.
Ha recordado que la mesa se rompió porque ambas partes no partían de "los mismos puntos", que giraban alrededor de "respetar los salarios de los trabajadores, hacer unas tablas salariales que igualasen todos los salarios" porque "hay una doble escala salarial".
Óscar Otero ha avanzado que se seguirán manifestando "hasta resolver el problema" y ha señalado que la situación "está minando la moral de los trabajadores". "Estamos teniendo muchas bajas", ha remarcado, en referencia a las dos renuncias que tuvieron la semana pasada y el despido que hubo hace dos.
El 29 de noviembre los trabajadores de los centros están llamados a huelga. Aunque no tienen un censo del total de personal, Otero cuenta con un "seguimiento casi del 100%", con 45 trabajadores que ya han confirmado que secundarán el paro.
Mientras tanto, el representante del comité de empresa ha informado de que seguirán informado a los usuarios, que "al fin y al cabo son los más perjudicados". "Está entrando gente muy poco cualificada, y eso va en detrimento de la calidad del servicio", ha concluido.
Durante cerca de una hora, trabajadores y usuarios han protestado frente al ayuntamiento de Santiago de Compostela, con proclamas como "Con Ferrovial, la cosa va muy mal"; "Martiño, escucha, estamos en lucha" y "Ferrovial culpable, ayuntamiento responsable".
GOBIERNO "PROACTIVO"
El alcalde de Santiago de Compostela, Martiño Noriega, ha ironizado sobre "las buenas palabras" que dicen haber recibido los representantes de los centros cívicos, y ha llamado a "no equivocarse de enemigo".
Noriega ha recalcado "la proactividad" del gobierno municipal ha asegurado que "difícilmente se encontrarán con un gobierno tan proactivo". "No tenemos una postura de equidistancia, adoptamos una posición de defensa de las reivindicaciones de los trabajadores", ha añadido. "Hay gobiernos que se lavan las manos en los conflictos entre empresas y trabajadores. Nosotros no".
El alcalde compostelano ha subrayado la importancia de "hablar con claridad y ser sinceros", porque "la dinámica de los centros es complicada".
Noriega ha recordado la "situación tan complicada" que se encontraron, en referencia a los "contratos ilegales y las sanciones que costaron un millón de euros a los vecinos" consecuencia de las actuaciones de la anterior contrata.
"A lo largo de estos meses intentamos garantizar la subrogación del personal", ha continuado el alcalde, y ha dicho que ahora están trabajando para forzar reuniones entre las dos partes.
"VOLUNTAD DE ACUERDO"
Martiño Noriega se ha mostrado sorprendido porque la mesa de negociaciones se rompiera "tan rápido" y ha expresado su deseo de que se negocie un nuevo convenio. "Nuestra postura, dentro de la limitación que tenemos como institución, es absolutamente proactiva", ha repetido.
El regidor compostelano ha hecho hincapié en que "tiene que haber voluntad por ambas partes de llegar a un acuerdo" y ha abogado por "no vender motos" al ser preguntado por una apertura de expediente.
Sobre esta cuestión ha explicado que "un proceso de rescisión de un contrato, por las consecuencias que puede haber, no es una cuestión inmediata" y que "no se pueden generar falsas expectativas". Por eso, ha pedido que haya "tranquilidad".
Por último, Noriega ha insistido en la importancia de "alcanzar un acuerdo que permita tener estabilidad", y ha concluido con un mensaje: "No puede ser que se lograse antes estabilidad con situaciones ilegales y ahora no. Entonces habría que ser malpensados".
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