​El Resurrection Fest espera un movimiento del Gobierno de España para poder aplazar el festival

La organización explica los motivos por los que todavía no ha pospuesto el evento, ya que esperan a las medidas que marquen desde Moncloa.

Si bien desde el festival que se celebra en Viveiro el próximo julio son sabedores de la situación excepcional que atraviesa España y admiten que “dadas las condiciones actuales” el principal escenario que barajan es aquel en el que no se podrán celebrar eventos multitudinarios como el Resu.

Sin embargo, el festival se mantiene inalterado por el momento. “Este es un evento que implica manejar cientos de contratos con bandas, proveedores, patrocinadores…que no podemos romper de manera unilateral”, afirman. “Para ello se necesita una cláusula de fuerza mayor, algo que solo puede establecer el Gobierno”, sostienen los organizadores, que esperan que Moncloa tome una decisión similar a la que ya han tomado otros gobiernos europeos.

Desde la organización agradecen la “paciencia” de los asistentes, pero remarcan el carácter independiente del festival y la falta de un seguro que cubra una crisis global como esta que pueda asumir las “enormes pérdidas” que traería consigo la suspensión del evento y que afectaría a todos los actores implicados, desde las bandas a los trabajadores del festival, pasando por el efecto que tendría sobre el turismo y la economía de Viveiro.

“La parte positiva es que las bandas se muestran muy colaborativas a la hora de reorganizar el cartel, y estamos casi convencidos de que en el más que probable caso de no poder hacer el festival este año, nuestro 15ª aniversario se celebrará en 2021 por todo lo grande con todos los atractivos del cartel actual y muchas más sorpresas”, concluye la organización, que advierte que próximamente detallará qué ocurrirá con las entradas, si bien confía en que sean válidas de cara al próximo año “de forma automática” y ofrecerá reembolsos a aquellos que así lo deseen.