Trabajadores de Financiera El Corte Inglés alertan de "trampas" y "sobrecarga de trabajo" por falta de personal

La "sobrecarga de trabajo" en Financiera El Corte Inglés (FCI) es tal que es imposible dar un servicio de calidad. Así lo denuncia la Coordinadora Sindical de Clase (CSC), uno de los sindicatos con representación entre sus trabajadores.

"Le recordamos a la empresa que no quiso renovar el contrato a decenas de compañeros y compañeras a los que mandó al paro mientras el servicio de Atención al Cliente seguía desbordado de llamadas sin atender, pese a las trampas de la dirección para que estas llamadas no cuenten en las cifras de abandono", denuncia la central en un comunicado.

Esa referencia a las presuntas "trampas" no es baladí. Las financieras tienen la obligación de remitir información sobre el número de quejas y el importe en juego al regulador. Según los últimos datos remitidos a la CNMV,  la empresa controlada  recibió el año pasado el doble de reclamaciones que el anterior.

Es evidente que la carga de trabajo aumentará al hilo de la crisis económica provocada por la pandemia. Pese a ello, la central indica que la plantilla sigue recortándose. Por ejemplo, no renovando a los compañeros que debían acceder a un contrato fijo para substituirlos temporalmente por otros, que en su día ya no habían renovado.

"Tampoco es forma de tratar a los clientes", se queja CSC, que indica que FCI  está  "rebajando la calidad del servicio en área tan delicada como es recuperaciones, donde se tratan a los clientes que por algún motivo se han visto obligados a devolver el recibo, en una situación tan complicada como esta que estamos viviendo todos".

Como ejemplo del deterioro, el sindicato informa que algunos trabajadores tienen que aprender por su cuenta a gestionar nuevos tipos de expedientes de recuperación de deudas por su cuenta, leyéndose un simple PDF.

FCI apuesta por "seguir precarizando los puestos de trabajo con nuevos contratos temporales" pese a sus considerables beneficios.  En 2018 ganó 66 millones de euros y en 2019 un 15 por ciento más, 76 millones de euros.

EL SANTANDER PLANEABA CONVERTIRLA EN UN  BANCO

Aún conservando la marca de El Corte Inglés, lo cierto es que la financiera ya no está controlada por el grupo. Debido a su fuerte deuda, El Corte Inglés tuvo que vender el 51% de la compañía al Banco Santander por 140 millones en octubre de 2013. 

Antes de la crisis, los socios  planeaban reconvertir FCI en un banco, que diera créditos no solo a los clientes de los centros comerciales, también a PYMES y proveedores. Está por ver si estos planos son factibles debido al COVID-19, que ha provocado un gran recorte en las ventas y el mayor ERTE de España, con más de 25.000 afectados.