Desconvocada la manifestación del domingo en Lugo por Alcoa San Cibrao, cuyo comité se reunirá con Reyes Maroto

El encuentro entre el comité de empresa y la ministra de Industria se producirá el martes, un día antes que la mesa multilateral del miércoles.

Para este domingo estaba anunciada una manifestación por las calles de Lugo, que finalmente no tendrá lugar después del anuncio de la reunión.

Protesta empleados de Aloca San Cibrao | Foto: EP

El comité de empresa de la planta de Alcoa San Cibrao, en Cervo (Lugo), recibió este viernes una notificación para reunirse con la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, el martes 29 de junio.

Así lo ha informado el propio comité de empresa a través de un comunicado, en el que además explica que este paso dado por parte del Ministerio les ha llevado a desconvocar la manifestación que estaba prevista para este domingo en Lugo.

Con esta decisión, los trabajadores quieren evitar que "se les utilice como excusa a la hora de intentar llegar a una solución" de este conflicto que arrastra ya más de un año de incertidumbre, desde que Alcoa anunció su intención de ejecutar un despido colectivo que, no obstante, fue anulado posteriormente por la justicia.

Aparte de la reunión entre el comité y la ministra del martes, para el día siguiente, el miércoles 30, está convocada una nueva reunión multilateral sobre la situación de la factoría y su posible venta.

Esta es la segunda ocasión en la que se impulsan las negociaciones para intentar vender la planta de aluminio de A Mariña a un tercero. La primera, en otoño pasado, terminó frustrada. Ahora, la participación o no de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) como mediadora en la operación ha sido uno de los puntos clave en los que estaban en desacuerdo la compañía y el Gobierno.

Esta discrepancia guarda relación con la sentencia condenatoria que acaba de dictar la Audiencia Nacional sobre Alcoa tras la venta de las factorías de A Coruña y Avilés. Este hecho, según la empresa, condiciona su situación en España, al poner en evidencia, a su juicio, las dificultades de vender una planta inviable desde el punto de vista "estructural". Por su parte, los trabajadores remarcan que la fábrica de Cervo genera beneficios.