Opel mantendrá todas las fábricas en su nuevo plan estratégico impulsado por PSA

Cadena de montaje de Opel.

La firma automovilística alemana Opel tiene la intención de mantener y modernizar todas las plantas y evitar salidas forzadas, según contempla su plan estratégico de futuro tras su compra por parte del consorcio francés PSA, con el que pretende asegurar el retorno sostenible de la compañía a los beneficios.

La firma alemana de automóviles Opel y su homóloga británica Vauxhall, adquiridas a mediados de año por parte del Grupo PSA a General Motors, han presentado este jueves su nuevo plan estratégico, denominado PACE!, que contempla volver a la rentabilidad para el ejercicio 2020 y rebajar su 'break even' a 800.000 vehículos comercializados al año.

Como parte del PACE!, Opel/Vauxhall tiene previsto electrificar todas sus líneas de automóviles para 2024, de forma que se ofrecerá una versión de propulsión eléctrica 100% o una híbrida enchufable junto con motores de combustión interna que habrán mejorado su eficiencia.

Por otro lado, Opel/Vauxhall mejorará su competitividad a través de la reducción de costes y gastos, consiguiendo un ahorro de 700 euros por coche fabricado para 2020.

Al mismo tiempo, el plan estratégico, impulsado por Carlos Tavares, CEO de PSA, contempla una "alineación" de los costes laborales con la facturación "al nivel de las mejores referencias de la industria". La empresa destacó que esta mejora de la competitividad motivará nuevas asignaciones de vehículos a sus plantas, aumentando la tasa de utilización de las mismas en la próxima década.

De momento, no se espera que la integración afecte a la planta viguesa de PSA. "El plan está diseñado con la clara intención de mantener todas las plantas y evitar los despidos forzosos en Europa. La reducción necesaria y sostenible de los costes laborales se alcanzará con medidas responsables, como conceptos innovadores sobre el tiempo de trabajo, programas voluntarios o planes de jubilación anticipada", explicó la empresa.