Farmacias alertan del desabastecimiento del polémico Ozempic, "adelgazante milagroso" y fármaco para la diabetes

De un tiempo a esta parte se habla de los efectos del fármaco Ozempic, al que relacionan con "resultados milagrosos" para la pérdida de peso. Esta medicina se viralizó en los últimos tiempos, especialmente en redes sociales, por su uso -muchas veces no autorizado- como adelgazante, pese a que hablamos de un tratamiento indicado para los pacientes con diabetes tipo 2 y para aquellos con riesgo cardiovascular. Entre sus efectos, Ozempic reduce el apetito y promueve la saciedad. Sin embargo, ya sea por su popularidad o por otros problemas que rodean a la industria farmacéutica, ahora es la red de farmacias de LUDA Partners la que alerta del desabastecimiento de esta marca, para la que no hay alternativas capaces de resolver el problema. 

UN MERCADO NEGRO DE OZEMPIC

Desde la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) subrayan que el desabastecimiento de medicamentos se produce cuando "la situación en la que la disponibilidad de un medicamento en el canal de distribución (mayoristas y farmacias) es inferior a las necesidades de consumo nacional". Desde la red de farmacias advierten que ni Wegovy ni Mounjaro, otros medicamentos similares, han podido resolver el problema. 

En las farmacias son conscientes de que el Ozempic ha ganado popularidad "por su eficacia en la pérdida de peso, lo que ha impulsado su demanda más allá de las previsiones iniciales". "Su uso con fines estéticos o como herramienta para combatir la obesidad, comunicado de forma viral a través de las redes sociales, ha disparado, entre otras, el interés tanto del público como de la industria, provocando una presión sin precedentes sobre los canales de suministro", detallan. 

España no es el único territorio donde hay escasez y los enfermos de diabetes están sufriendo la falta de este medicamento que influencers en plataformas como TikTok, Instagram o Twitter han hecho disparar su demanda, pese a los riesgos que existen de recibir un tratamiento sin prescripción médica. Náuseas, vómitos, diarrea o dolor abdominal son algunos de los efectos secundarios asociados a su uso sin receta, dándose, incluso, problemas en el páncreas y en la mayoría de los casos un efecto rebote sobre aquellos que han dejado de tomarlo una vez que han perdido peso. 

También los canales "no oficiales" para el suministro de fármacos han hecho un presumible acopio de Ozempic, lo que provoca todavía más desabastecimiento en las farmacias ante un mercado negro donde se multiplican los peligros, con casos del fenómeno conocido como 'Cara de Ozempic', que es una flacidez facial derivada de la pérdida repentina de grasa.

¿UNA SOLUCIÓN PARA LA SANIDAD?

Con todo, dentro de la industria Ozempic ha abierto debates que van desde su acceso, resultando muy costoso en aquellos lugares sin sanidad pública, y el importante hallazgo que supone para tratar el sobrepeso y la obesidad, que solo en España afecta a un 16% de la población según los últimos datos del Informe Anual del Sistema Nacional de Salud (SNS). 
 

"Se ha desatado una auténtica carrera entre los grandes laboratorios por liderar un mercado global multimillonario, compitiendo en el desarrollo de fórmulas para responder a una demanda creciente que, por ahora, parece insaciable", indican desde LUDA Partners, que pone el foco sobre el desabastecimiento que ya catalogan como "cronificado" en la red española, pues los primeros indicios datan de 2023 y los últimos informes de faltas no han hecho más que evidenciar la ausencia de soluciones. En el primer trimeste de este año significó más del 10% de los avisos, lo que habla de "una escalada sostenida". 
 

"La aprobación de Wegovy en 2024, también de Novo Nordisk, y la entrada de Mounjaro, de la farmacéutica Lilly —que busca posicionarse como alternativa directa— generaron expectativas de que la presión sobre Ozempic disminuyese. Sin embargo, estas nuevas incorporaciones no han logrado frenar el problema. Aunque sus porcentajes de faltas aún son reducidos, han comenzado a reflejarse en los informes: en el primer trimestre de 2025, Wegovy representó el 0,13% de las faltas y Mounjaro el 0,09%", anotan.

No obstante, desde la red de farmacéuticas insisten en mantener la investigación sobre este fármaco y sus homólogos, pues en un contexto de "epidemia" por los casos de sobrepeso y obesidad, "tratamientos como Ozempic, Wegovy o Mounjaro podría tener efectos potenciales a nivel sanitario, económico y social".
 

"A pesar de su alto coste inicial, los tratamientos GLP-1 presentan un potencial significativo para generar ahorros a largo plazo en los sistemas de salud públicos, siempre y cuando contribuyan a reducir la prevalencia de enfermedades asociadas con la obesidad. Según el informe de Allianz Trade ‘The Weight is Over: How GLP-1 Treatments Are Reshaping Pharma and Beyond’, si las tasas de obesidad se estabilizan, los GLP-1 podrían ahorrar hasta 2 billones de euros en los próximos 10 años a nivel global. Aunque este ahorro dependería de garantizar un acceso equitativo a los tratamientos, una eficacia sostenida y un cambio real en los hábitos de vida de los pacientes", zanjan.