Enfermeras y fisioterapeutas exigen en Santiago el fin al recorte de sus pagas extra
Tras 15 años de pérdidas salariales, profesionales del Sergas se concentran frente al CHUS para reclamar la recuperación íntegra de sus pagas extraordinarias, en un contexto marcado por el aumento del coste de la vida y críticas a la gestión pública.
Centenares de enfermeras y fisioterapeutas del Servizo Galego de Saúde (Sergas) se concentraron este jueves frente al Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) para protestar contra el recorte de sus pagas extraordinarias, una medida que lleva mermando sus salarios desde 2010. Convocados por el Sindicato de Enfermería (SATSE), los manifestantes denunciaron que esta situación les ha supuesto una pérdida media de 11.000 euros por profesional en los últimos 15 años.
UNA DÉCADA Y MEDIA DE RECORTES
La protesta, que se suma a otras celebradas en hospitales y centros de salud de toda España, tuvo como lema “De nuestra extra, que no se coman ni un euro”. Los profesionales expresaron su indignación con cánticos como “Mi extra no se toca” o “Es mi sueldo, es mi derecho”, visibilizando una medida que consideran “discriminatoria” y que ha afectado a unas 30 pagas extraordinarias desde su implantación. Según SATSE, cada profesional pierde anualmente unos 700 euros de media debido a este recorte.
El sindicato señaló que la crisis económica de 2008 fue la justificación inicial para esta medida, impulsada por el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Sin embargo, ni los gobiernos posteriores de Mariano Rajoy ni de Pedro Sánchez han revertido la situación, a pesar de la recuperación económica. Los manifestantes también criticaron a los partidos políticos que, según ellos, “no han hecho nada” para enmendar esta medida en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
INDIGNACIÓN ANTE LA SUBIDA DEL COSTE DE VIDA
Otro punto destacado en la concentración fue la pérdida de poder adquisitivo de estos profesionales, estimada en un 20% en los últimos años debido al encarecimiento del coste de la vida. Como ejemplo, citaron el precio del aceite de oliva virgen extra, que ha pasado de 2,80 euros por litro en 2010 a 6,5 euros en 2025. “Mientras nuestros salarios están congelados, todo se dispara”, lamentó un portavoz de SATSE.
Además, los profesionales denunciaron que este recorte vulnera normativas como el Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud y el Estatuto Básico del Empleado Público, que garantizan que el sueldo base y los trienios de las pagas extras sean equivalentes a una nómina mensual. “En el sector privado, las pagas se cobran íntegras. ¿Por qué no en el público?”, se preguntaron los manifestantes.
CRÍTICAS A LA GESTIÓN PÚBLICA
La concentración también sirvió para denunciar el “agravio” que sienten enfermeras y fisioterapeutas en un contexto de corrupción, malversación y despilfarro de recursos públicos. “Mientras se rescatan bancos o se financian obras innecesarias, a nosotras nos niegan lo que es nuestro por derecho”, afirmaron desde SATSE. Los manifestantes recordaron casos de sobresueldos y contrataciones de asesores como ejemplos de una gestión que consideran injusta.
Desde el sindicato, se subrayó que “15 generaciones de enfermeras y fisioterapeutas no han conocido una paga extra completa”. “No queremos más fotos de políticos alabando la sanidad mientras se nos minusvalora”, declararon, exigiendo el fin de las “excusas” y la recuperación inmediata de sus derechos salariales.
ACCIONES EN TODO EL ESTADO
SATSE ha impulsado diversas iniciativas a nivel nacional, como el reparto de carteles y octavillas, así como reuniones con responsables políticos y administrativos para presionar por la recuperación de las pagas extraordinarias. La concentración en Santiago forma parte de una serie de movilizaciones en hospitales y centros de salud de otras comunidades autónomas, todas bajo el mismo lema.
Los profesionales del Sergas reiteraron su compromiso de continuar con las protestas hasta que se restituyan sus derechos. “No pararemos hasta que nuestras pagas sean íntegras. Es una cuestión de justicia”, concluyeron desde SATSE.
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