El embarazo no empieza en la primera ecografía: hábitos desde la preconcepción que recomienda Quirónsalud

Los nueve meses de embarazo, e incluso el periodo previo, determinan en gran medida la salud física y emocional de ambos. Cada hábito —desde la elección de alimentos hasta los horarios de descanso— ejerce una influencia directa, según destacan los profesionales de la atención materna que atienden a las usuarias de Quirónsalud.

MÁS CALIDAD QUE CANTIDAD EN LA MESA

El viejo dicho de “comer por dos” queda descartado. La prioridad es seleccionar alimentos reales y cercanos, minimizando los ultraprocesados. Frutas, verduras, legumbres, proteínas magras (pescado, huevos, carne sin grasa) y grasas beneficiosas como aceite de oliva virgen extra, aguacate o frutos secos deben dominar el plato. También se aconseja evitar azúcares añadidos, harinas refinadas y garantizar una hidratación adecuada con aguas de buena mineralización.

Algunos componentes destacan por su impacto. Los ácidos grasos omega-3 del pescado azul, semillas de lino o chía reducen el riesgo de preeclampsia y apoyan el desarrollo neurológico del feto. Los lácteos fermentados (yogur, kéfir) aportan probióticos que fortalecen la microbiota, mejorando digestión, inmunidad y equilibrio emocional a través del eje intestino-cerebro.

El rango considerado óptimo se sitúa entre 9 y 12 kilos, aunque varía según la mujer. Mantenerlo en parámetros razonables previene complicaciones en el parto y posparto. Las matronas y expertos en nutrición perinatal recomiendan acompañamiento profesional en lugar de dietas estrictas.

EJERCICIO, SUEÑO Y SOL: TRES ALIADOS SILENCIOSOS

La actividad física moderada tres o cuatro días por semana —caminar, nadar, yoga prenatal o pilates— regula el metabolismo, la circulación y las hormonas. El descanso de calidad, con horarios regulares y menos pantallas nocturnas, permite la regeneración celular y el equilibrio hormonal. Por su parte, unos minutos diarios de sol favorecen la síntesis de vitamina D, esencial para huesos, sistema inmunitario y estado de ánimo.

Los especialistas consultados coinciden en definir el embarazo como “un proyecto de salud y amor” en el que cuidarse a una misma es el primer gesto de cariño hacia el bebé. Confiar en matronas, ginecólogos o nutricionistas con los que exista buena conexión y aceptar su acompañamiento forman parte indispensable de ese cuidado integral.