La presión del turismo no afloja en Santiago de Compostela a dos semanas de que arranque la tasa turística

Moverse por la Praza da Quintana, dependiendo de la hora, es misión imposible en los meses de verano. Largas y serpenteantes colas de peregrinos que quieren entrar en la Catedral de Santiago y orar ante el apóstol colapsan una de las principales plazas de la capital gallega, a donde este año han acudido más de 414.000 peregrinos, según los datos actualizados por la Oficina do Peregrino. La realidad es que esa estampa de saturación turística va más allá de los meses de junio, julio y agosto, saliéndose de la temporada alta, cuyo fin marca este año el inicio de la tasa turtística en la ciudad compostelana. 

EL CAMINO HASTA LA TASA

Será el 1 de octubre cuando los establecimientos tendrán que empezar a cobrar la nueva tasa aprobada por el Concello de Santiago de Compostela, una de las grandes medidas propuestas para esta legislatura, que logró los votos a favor de BNG, Compostela Aberta, PSOE y no adscritos y arrancó una abstención al PP. Se cumple así con una medida que no nace del Gobierno de Goretti Sanmartín, pues ya durante las legislaturas de Martiño Noriega (CA) y la última etapa de Sánchez Bugallo (PSOE) al frente del consistorio se debatió enfervorecidamente sobre esta tasa. 

La tasa, en palabras de la concejala de Turismo, Míriam Louzao, supone "comenzar a equilibrar los costes que generan la actividad turística en la ciudad", en un momento en el que el debate sobre la turistificación ha llegado a las calles de la ciudad, con efectos sobre la vivienda y los comercios. Precisamente, sectores como la hostelería, denuncian haberse quedado fuera del debate con el gobierno local.

De igual forma, esta tasa no deja de ser un recargo al impuesto gallego de estancias turísticas aprobado por la Xunta de Galicia, normativa que marca las pautas de cobro sobre estancias que van de uno a cinco días y cuyas cantidades oscilan entre el euro y los 2,5 por día. También A Coruña aprobó recientemente la medida y en Vigo debaten sobre su puesta en marcha.

En cualquier caso, habrá que esperar también a que se conforme la comisión encargada del seguimiento de la tasa turística, con el Foro de Turismo Sostenible al frente de la misma. Este comité revisará el destino de la recaudación, considerando que el 80% de esta partida debe ser redirigida a acciones de turismo sostenible, tal y como contempla la ley. De igual manera, la comisión será el lugar donde se debata la idoneidad de aplicar una tasa a los excursionistas, una opción que está ahora mismo encima de la mesa.