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La maniobra de un conductor novel se hizo viral estos días por la conducción peligrosa e ilegal que realiza en pleno centro de la ciudad de Ourense.
La Guardia Civil identificó este lunes a un conductor de un camión, un hombre vecino de Becerreá (Lugo) de 41 años, como supuesto autor de un delito contra la seguridad del tráfico al superar, prácticamente, en ocho veces la tasa de alcohol permitida en aire espirado cuando circulaba por una carretera perteneciente al término municipal de Lugo.
El vehículo tenía la luneta frontal rota y con restos de sangre, según las primeras informaciones. El conductor no es el propietario del mismo, pues figura registrado a nombre de su pareja.
La Guardia Civil ha interceptado en la autopista del Atlántico, la AP-9, en Mos (Pontevedra) en sentido Vigo, a un conductor que cuadruplicaba la tasa de alcohol máxima permitida y que suponía un "grave riesgo para la circulación".
Dos patrullas interceptaron el coche en la zona de Cuatro Caminos esta mañana.
La Guardia Civil trata de localizar la furgoneta Citroën C15 blanca.
El conductor, de 40 años y natural de Noia, fue captado por un rada en la Autovía del Barbanza.
Varios condutores avisaron de una ambulancia en zigzag por la A-55. El hombre se fugó del lugar.
El agente estaba fuera de servicio, pero junto con los trabajadores de una gasolinera impidieron que el individuo volviese a coger el coche.
La Guardia Civil lo interceptó en un control en la autovía AG-53, donde dio positivo por cocaína.
El implicado es un vecino de Caión (A Laracha) de 44 años que está siendo investigado por dos delitos contra la seguridad del tráfico.
El accidente se registró en las inmediaciones de la ciudad de Lugo, cerca del desvío a Castro de Rei.
Fue interceptado en el kilómetro 7 de la carretera LU-530 | Carecía de permiso de conducir y llevaba al menor en el asiento del copiloto sin retención.
Perdió todos los puntos del permiso y ahora le imputan su quinto delito contra la seguridad vial.
El accidente dañó una tubería de suministro de gas y los cuatro turismos estacionados. Superó el 0,9 en la prueba de alcoholemia.
Transitaba por la carretera N-120 a la altura del kilómetro 484 cuando cayó por un puente en el lugar del Soldón.
El conductor, de setenta años, se estaba incorporando por el peaje de Torneiros-O Porriño en dirección opuesta a la de la circulación.
Estaba consciente, pero no podía salir porque el coche había quedado en una posición peligrosa. Una ambulancia lo llevó al hospital.
No tiene carnet, triplicaba la tasa de alcoholemia, llevaba a dos niños de corta edad en un coche sin papeles ni seguro.
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