En los últimos cinco años, desde octubre de 2020 hasta la fecha, han dimitido seis primeros ministros en Francia, un reflejo de la notable inestabilidad política durante el segundo mandato del presidente Emmanuel Macron. Sébastien Lecornu aguantó 27 días, al no lograr formar un gobierno de unidad nacional que pudiera obtener la confianza del parlamento.
Frente a los negros presagios y los reveses para la unidad continental articulados por un populismo nacionalista que parecía imparable, hoy los europeístas nos congratulamos con la victoria de Macron.
Por eso la pregunta que hoy nos hacemos es muy simple y al mismo tiempo terrible: ¿Y si en Francia fracasa el pacto republicano, nos acercamos, tal vez, al fin de la Quinta República?